El Athletic ya tiene sus tres puntos. El Comité de Competición decidió ayer que los 21 minutos restantes del encuentro del pasado sábado no se disputarán y que la victoria corresponde, por tanto, al equipo rojiblanco. Además, sancionó con 9.000 euros y dos partidos de clausura al Betis, que ya ha anunciado que recurrirá ante Apelación.

El Comité dividió su decisión en dos partes. Por un lado, sancionó al Betis con 9.000 euros y dos partidos de clausura del Ruiz de Lopera. Una cifra inferior a la que se venía barajando, al considerar «determinante» el hecho de que «el entorno del agresor reaccionara de manera inmediata, identificándole, deteniéndole y poniéndole a disposición de la policía», así como el posterior comportamiento del club andaluz, cuyos precedentes en este sentido no se han tomado en cuenta.

Además, de forma excepcional y por primera vez en la Liga, se decidió dar por terminado el choque con 1-2 que en el momento de la suspensión reflejaba el luminoso. Según explicó el presidente del Comité de Competición Alfredo Flórez, esta medida extraordinaria se apoya en cuatro razones. Para empezar, que el agredido fue un jugador; en segundo lugar, que no pudo seguir sobre el terreno de juego. Además, se destaca que la reanudación del choque no contemplaría el principio de igualdad, ya que el Athletic tendría que jugar con diez, al haber realizado ya los tres cambios, y sin portero. Y por último queda el principio de responsabilidad del propio Betis.

Satisfacción relativa

Nada más conocerse la resolución, Fernando García Macua compareció en Ibaigane, donde se confesó satisfecho a medias. «No podemos estar satisfechos con que acabe un partido antes del tiempo reglamentario por circunstancias como estas, habríamos deseado disputar los noventa minutos el sábado, en las debidas condiciones. Pero también entendemos, y esta no es una guerra que pretendamos entablar contra ningún club que lo acontecido tenía que tener consecuencias. Y nos parecen ajustadas las que ha dictaminado el Comité», reconoció, aunque puntualizó que las alegaciones presentadas por el Athletic no se han referido a la sanción que ha recaído sobre el Betis, sino a la suspensión del choque.

En referencia a la atención que se va a poner de ahora en adelante a todo lo que suceda en San Mamés, el presidente rojiblanco enfatizó que «institucional y socialmente, tenemos que ser muy coherentes con los sentimientos casi a flor de piel que hemos vivido estos días. Hay que tener claro que aquello que no nos gusta que nos hagan fuera, no tiene que ocurrirle a ningún contrario en nuestro estadio», subrayó.

«Cacicada de Villar»

En el Betis, lógicamente, la noticia cayó como una bomba.

El responsable de sus servicios jurídicos Manuel Castaño confirmó que el club recurrirá ante el Comité de Apelación y, si agota la vía deportiva sin obtener un resultado de su agrado, llegará hasta la justicia ordinaria, al considerar que la decisión adoptada es «una barbaridad basada en un principio de responsabilidad objetiva sacada del derecho medieval».

Más lejos fue el presidente verdiblanco , al considerar que sanción es «una cacicada de Villar». En opinión de Pepe León, «Van a por nosotros, Villar no quiere mandar a Segunda División. Está claro que nos están puteando», insistió.