Raimundo Fitero
Los sustitutos
El Gran Wyoming está de vacaciones, pero el programa «El Intermedio» de La Sexta se ha mantenido en la parrilla y con emisión en directo. Lo que quiere decir que la mayoría del equipo ha tenido menos vacaciones que su presentador. La solución que han buscado desde el programa es buscar unos sustitutos al presentador. Concretamente, uno por día, José Corbacho, Santiago Segura y Pablo Carbonell, han sido los que de lunes a miércoles se han ido sucediendo en la silla central del plató conduciendo el programa. Y con esta tripleta hemos podido llegar a algunas conclusiones.
En primer lugar destacar que lo importante, como tantas veces sucede, es que el programa tiene una estructura sólida, unos buenos guionistas, un equipo de presentadoras y animadoras, Beatriz Montañez, Tais Villa, Cristina Peña, Yolanda Ramos o Usun Soon, que son la parte vertebral de la propuesta, y que la figura del presentador es la que debe ser capaz de canalizar todas estas energías positivas, relanzarlas y darles su impronta, su ingenio, su capacidad de empatía y su facilidad para la comunicación con el telespectador.
Dicho lo anterior, en la sucesión de presentadores sustitutos se ha ido de más a menos. José Corbacho tiene mucha facilidad de palabra, muchas horas de presentación, de televisión, de escenario, y supo acomodarse, jugar con la supuesta competencia con el titular, vender su nueva película y ajustarse a las claves propias de la oferta. Lo de Santiago Segura rozó un poco el patetismo. Apareció haciendo de él mismo, con sus gracias de corto vuelo, con sus obsesiones, demostrando mucha inseguridad y muy preocupado por cuestiones colaterales más que por el meollo de la cuestión. Pablo Carbonell fue un remate muy flojo. Anulado, como si simplemente fuera un espontáneo, sin aportar nada de personalidad, aunque fue el que se dejó llevar mejor por las chicas, que son, nadie lo dude las estrellas de «El Intermedio», las que no tienen sustitutas, las que le confieren personalidad y calidad en todos los órdenes. Y al que está de vacaciones le ha salido redondo: ha salido reforzado con la presencia de estos tres sustitutos que no le han hecho nada de sombra.