El italiano del Ag2R ha sido una de las revelaciones de la temporada tras acabar segundo una prueba del nivel de la País Niza a sólo tres segundos de Davide Rebellin y ganar en Lugano. Aunque debutó en un gran equipo como Mapei en 1999 y pasó por Fassa Bartolo, corrió en equipos de segunda fila hasta su llegada al Ag2R, donde a los 30 años se ha ganado un hueco en el primer plano. Ahora se marca los objetivos de lograr ganar una clásica, entiende que la Flecha Valona es la que mejor le va, y una etapa en el Tour. Tomará la salida en el Giro, pero sólo piensa correr la primera parte para centrarse en la prueba gala.

¿Cómo ha afrontado su participación en la Vuelta al País Vasco tras acabar segundo en París Niza ?

Venía con el objetivo de hacer una buena preparación para las clásicas de las Ardenas, pero esperaba hacer bien País Vasco.

¿Por qué no ha podido dar el mismo nivel que entonces?

En la primera etapa no estuve bien con la lluvia y el frío. En esas condiciones no me gusta mucho correr. Mi forma es buena, pero la lluvia y el frío de ese día me perjudicaron. Noté que no estaba bien, que las piernas estaban hinchadas y no era posible estar con los mejores. A partir de ese día cambié de objetivos y pensé en intentar ganar alguna etapa. Pero estoy tranquilo porque he hecho una buena preparación para las clásicas.

Tampoco pudo estar en la lucha por repetir victoria en la clásica de Lizarra del sábado...

Después de París Niza y de la Milán San Remo tuve dos semanas tranquilas en casa. El Gran Premio Miguel Indurain era la primera carrera que disputaba y estaba un poco bloqueado, pero estoy tranquilo para las clásicas. El lunes las piernas no estaban bien por el frío y la lluvia y era mejor no arriesgar, pero el resto de los días he ido mejor.

Ha venido dos veces a esta Vuelta y tampoco el año pasado pudo estar con los mejores.

Poco antes de ir al Gran Premio Miguel Indurain estuve enfermo. Estuve muy fuerte y gané la clásica, pero en País Vasco no marché bien, aunque hice cuarto en una etapa. Este año venía mejor tras un buen inicio de temporada, con la idea de acabar entre los diez primeros y conseguir una etapa, pero no ha podido ser. Me da pena porque siempre me dice mi compañero Arrieta que el recorrido es bueno para mí. Me favorecen que sean puertos duros y cortos, me van mejor que los puertos largos. En el País Vasco no hay subidas largas y también la crono era buena para mí.

¿Acabar segundo París Niza con opciones de ganar hasta el último día ha significado su explosión?

Lo intenté, pero era difícil porque Rebellin estaba muy fuerte. Hacer segundo a sólo tres segundos de él fue algo muy bueno, muy importante. Este año estoy mejor que nunca y quiero hacer bien las clásicas porque me encuentro muy a gusto en pruebas con distancias más largas. La que mejor me va por su final es la Flecha, pero puedo hacer bien la Amstel, aunque es la que menos se adapta a mis características, y la Lieja.

¿Cuáles son sus objetivos en lo que resta de temporada?

Mi primer objetivo importante son las clásicas y luego el Tour. Tras la Lieja, también iré al Giro, pero con la idea de correr sólo la primera semana o diez días para después hacer una buena preparación para ir a ganar una etapa en el Tour, que es muy importante para el equipo.