No querían que los representantes del Ministerio de Fomento español les pillasen desprevenidos, por lo que el lunes por la tarde decidieron encerrarse en el Ayuntamiento de Eskoriatza. Estaba previsto que ayer delegados del Ejecutivo del PSOE diesen comienzo al levantamiento de actas previas a la ocupación de tierras. Trámite que se iba a prolongar durante tres días.

Hacia las ocho y media de la mañana el movimiento ante el Ayuntamiento de esta localidad de Debagoiena resultaba inusual. Unas 40 personas habían pasado la noche en el edificio consistorial y decenas de vecinos y vecinas se acercaban para sumarse al acto de protesta convocado por AHT Gelditu! Elkarlana para las nueve.

Sobre la misma hora llegó un furgón de la Ertzaintza que se apostó a escasos metros del Ayuntamiento y desde donde bajaron una decena de agentes que, cámara en mano, intentaron capturar imágenes de los allí congregados. Según informaron las personas participantes en el encierro, la presencia policial fue incesante durante toda la noche. De hecho, cinco personas que «se encontraban colocando pancartas contrarias a este proyecto» fueron identificadas por la Ertzaintza, que les ha abierto un proceso judicial por «faltas». El lunes tendrán que comparecer en el Juzgado de Bergara.

A las nueve dieron comienzo a la concentración en la que se corearon numerosas consignas: «Ez, ez, ez... AHTrik ez», «Amalurra defenda dezagun» o «Herriak bizirik, AHTrik ez». Unos a las puertas del edificio; otros desde la balconada. Los opositores recordaban que el levantamiento de actas fijado por Fomento prevé la ocupación de 440.000 metros cuadrados de tierras agrarias y forestales para las obras del TAV en Eskoriatza, y hacían las declaraciones teniendo como telón de fondo la ladera en la que están construyendo la autopista Eibar-Gasteiz. Creen que los impactos producidos por ambas infraestructuras «abocarían a los núcleos de población rural de Mazmela, Zarimutz y Marin a una situación dramática de degradación ambiental y recesión demográfica».

En un mes y fuera del pueblo

Pasadas las nueve y cuarto llegaron los representantes del Gobierno de Madrid que, con paso firme, se dirigieron a la puerta de Consistorio. Las personas allí congregadas comenzaron a proferir gritos contra el TAV y a mostrar los carteles que portaban, mientras que los agentes de la Policía autonómica se apresuraban a arropar a los delegados ministeriales.

Las puertas del edificio consistorial, sin embargo, permanecían cerradas a cal y canto, y pese a que los representantes de Fomento se empeñaron en tocar la puerta para acceder al interior, nadie les abrió. Cinco minutos más tarde, decidieron desistir en su intento y alejarse.

El alcalde de la localidad, Pedro Lasagabaster (EAE-ANV), que aproximadamente a las nueve de la mañana había accedido al edificio, se acercó a los representantes del Ejecutivo español. Según afirmó posteriormente ante los medios de comunicación, fueron los mismos delegados del Ministerio quienes propusieron cancelar el acto alegando que «no se daban las condiciones adecuadas para ello», a lo que el alcalde no puso ningún impedimento.

La decisión fue recibida por los vecinos y vecinas con un sonoro aplauso. Cinco minutos más tarde, los representantes del Gobierno español abandonaban en su vehículo la localidad y tras ellos se marchaban los agentes de la Ertzaintza. Ahora tendrán que fijar una nueva fecha para llevar a cabo el trámite. A media tarde, fuentes de la Delegación del Gobierno español en la CAV citadas por Europa Press aseguraban que se celebrará en aproximadamente un mes en la Subdelegación de Gipuzkoa, al tiempo que incidían en que «sabotajes como el de hoy [por ayer] podrán servir para retrasar las obras, pero no para impedirlas».

El primer edil de Eskoriatza se mostraba satisfecho de que ayer no se hubiera llevado a cabo el levantamiento de actas y auguraba ya que «seguramente una segunda convocatoria se llevará a cabo fuera de la localidad, porque los habitantes han mostrado claramente su oposición». También el Ayuntamiento se ha posicionado contra este macroproyecto; por ello, Lasagabaster comentaba que, de llegar esa segunda convocatoria, «habrá que analizar cuál será la posición que tome el Gobierno municipal».

Los representantes de AHT Gelditu! Elkarlana también mostraron su satisfacción por cómo habían transcurridos los hechos. Según su portavoz, Mila Elorza, lo sucedido ayer en Eskoriatza es una muestra más de que la ciudadanía está contra el proyecto y que el movimiento popular puede parar las iniciativas «que las administraciones quieren imponer». «Al fin y al cabo, nuestra intención es ganar tiempo, porque sabemos que el tiempo juega a nuestro favor. Cada vez más personas se posicionan contra este proyecto y nosotros, como hasta ahora, seguiremos informando a la ciudadanía», agregó.

En ese aspecto, destacó la iniciativa Gelditour que se llevará a cabo en mayo: entre los días 4 y 31 recorrerá la geografía del país con el objetivo último de «extender la información sobre los impactos ambientales, territoriales, económicos y sociales del proyecto del Tren de Alta Velocidad y exigir la paralización de las obras y la realización de un amplio debate social sobre esta infraestructu- ra». «Para nosotros también ha sido una manera de medir fuerzas y hemos comprobado que la gente está dispuesta a luchar contra este proyecto», insistió Elorza.

«Demostraciones de fuerza»

Ésta no ha sido, sin embargo, la única demostración de fuerza que ha hecho el movimiento opositor al TAV esta semana, ya que anteayer la plataforma de Goierri presentaba ante la Subdelegación del Gobierno español en Gipuzkoa 2.100 alegaciones contra las expropiaciones del tramo Ordizia-Itsasondo.

Desde la coordinadora han recordado que la próxima cita del Ministerio de Fomento será en mayo, concretamente los días 6, 7, 8 y 13. Para esas jornadas está previsto que los representantes del Gobierno de Madrid lleven a cabo el levantamiento de actas en la localidad alavesa de Aramaio. Sobre esta cita, AHT Gelditu! Elkarlana adelantó que convocará actos de protesta.

Además, denunció «firmemente el proceso judicial abierto contra el alcalde de esta localidad por haber realizado una encuesta sobre el TAV por parte del delegado del Gobierno español, Paulino Luesma». En opinión de esta plataforma contra el TAV que reúne a diversos organismos, «la agresora conducta de los gobiernos español y vasco contra el movimiento de oposición a este proyecto es general».