José María Salmerón volverá a tener problemas para confeccionar un once de garantías para el importante partido del sábado en Las Palmas de Gran Canaria, ya que Pablo Casar y David Aganzo se recuperan mucho más despacio de lo previsto de sus respectivas lesiones y están descartados. Las bajas vuelven a concentrarse en la defensa y en la delantera, ya que David Coromina y Raúl Sánchez no podrán jugar en el Insular al estar sancionados, mientras que Mateo o Natxo Garro continúan con sus recuperaciones.

Pablo Casar realizó la mayor parte del entrenamiento, de ayer pero tuvo que terminar antes, al sentir molestias en el golpeo de balón. El cántabro continuó con el trabajo en el gimnasio y es muy difícil que pueda jugar el sábado. Aganzo, por su parte, se encuentra en Madrid, bajo la supervisión de un fisioterapeuta, que a su vez está bajo las órdenes de los servicios médicos del club albiazul. Así las cosas, el técnico almeriense deberá «improvisar» un central que acompañe a Gaspar en el eje de la defensa y parece que el elegido puede ser Francisco Javier Tarantino, que ya ha jugado alguna vez en esa posición en etapas anteriores. Iñigo Calderón podría ser otra solución de urgencia, pero parece que el gasteiztarra ocupará el hueco que dejará el de Bermeo en la banda izquierda, ya que Ángel también está lesionado.

Otra de las preocupaciones de Salmerón es la recuperación de Toni Moral, que ayer tampoco pudo entrenar junto al resto de sus compañeros. El catalán ya se perdió el partido ante el Poli Ejido, a pesar de que entró en convocatoria y los médicos del club esperan que esté en disposiciones de ser alineado ante Las Palmas.

Igor Martínez, por su parte, sigue entrenando con la selección española sub-19 en Madrid y se espera que vuelva hoy a Gasteiz.