ACB Victoria en Zurbano
La cuarta plaza fue para el único que la buscó, el Tau
Sin desplegar un juego demasiado brillante, el Baskonia puso mucha más intensidad y, a partir del tercer cuarto, terminó arrollando a un Pamesa que, sin Douglas ni Williams, acabó dejándose llevar
TAU BASKONIA 91
PAMESA VALENCIA 73
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
Va a ser verdad que a Fotsis Katsikaris le da igual terminar la fase regular en cuarta o quinta posición, o por lo menos su equipo no puso ayer demasiado empeño en impedir que el Baskonia se asegurara tener el factor cancha a favor en el play off. Y es que, sin forzar la máquina, ni mucho menos a tope, el equipo gasteiztarra le dio un soberano repaso al que posiblemente será su rival en octavos de final, que se mostró como un equipo excesivamente blando.
Con la Final Four en el horizonte, el choque fue un buen test para los gasteiztarras que, sin mostrarse para nada arrolladores, sí que por lo menos dejaron constancia de ser muy fuertes en el juego interior, pese a la ausencia de McDonald, desplegando una manifiesta superioridad en el rebote y basando ahí buena parte de su victoria.
El partido, como el ambiente de las gradas, comenzó frío, sin un dominador claro. Pete Mickeal, que luego desaparecería en el segundo cuarto, junto con Tiago Splitter, tomó las riendas ofensivas del equipo local, mientras que entre los visitantes, con Douglas y Williams desconectados, Milojevic llevó el peso de los suyos, bien secundado por House desde el perímetro con tres triples.
Tras el 24-23 del primer parcial, Sergi Vidal aportó al juego del Baskonia no sólo la chispa necesaria con su aparición, sino que activó el juego exterior junto con Teletovic. Entre ambos consiguieron cuatro triples que dispararon la renta baskonista en torno a los diez puntos, ya que el conjunto taronja acusaba mucho en ataque la ausencia de Milojevic, cargado de faltas excesivamente pronto, lo mismo que le ocurrió a Douglas. Sin embargo, como Singleton sigue sin coger el punto y Splitter necesitaba descanso, el juego interior baskonista flojeó algo en este cuarto y un par de rebotes defensivos mal cerrados permitieron a Timinskas dejar la diferencia en seis al descanso: 47-41.
Golpe definitivo
El Baskonia volvió a pegar un estirón en el tercer parcial y, a pesar de que se pudieron poner algunas dudas sobre la impli- cación total en algunas fases, sí que demostró mucho más deseo que un Pamesa que parecía dejarse ir en varias fases. Singleton fue tomándole el pulso a sus pares y, desde la superioridad en el rebote, los de Neven Spahija volvieron a llevar la diferencia por encima de los diez puntos. Salvo algún pick&roll bien ejecutado con Miralles, y un triple esporádico, Douglas y Williams seguían desconectados y el Pamesa se fue dejando ir, con la jugada con la que terminó el último cuarto como mejor ejemplo. A falta de cuatro segundos y con saque de fondo a favor, Katsikaris sacó a Douglas para buscar la canasta y la jugada terminó con canasta en contra tras robo de Prigioni.
Con el rival vendido, el último cuarto sirvió para que la parroquia de Zurbano gozara por fin de un triunfo tranquilo de su equipo y los jugadores se recrearan en los números y en acciones brillantes, como un mate de Singleton a pase de Planinic.
El pívot estadounidense presenció el partido a pie de pista junto al delegado y al relaciones externas del club. Muchos de sus compañeros tuvieron gestos cómplices con él y McDonald aplaudió sus buenas acciones.
Pese a la ausencia de Will McDonald, el equipo gasteiztarra, con tres jugadores, se mostró muy superior en la lucha por los rebotes, con un bagaje a su favor de +11, con 14 rechaces ofensivos, nueve de ellos para Mickeal.
Aunque no quiso adelantar nada, Neven Spahija se mostró dispuesto a perdonar a Will McDonald las declaraciones que tuvo contra él. El croata repitió una y otra vez que la decisión depende del club, pero dejó entrever que él ha olvidado lo sucedido. «No podemos matar a nadie. Él pidió disculpas y yo le quiero ayudar, lo fácil es mandar fuera a alguien y lo difícil ayudar a mejorar. La decisión es del club, pero yo tengo una relación normal y quiero a Will. Él sabe lo que he hecho por él y lo que puedo ayudarle, ha pedido perdón y ahora decidirá el club», señaló. Del partido, el técnico croata destacó que su equipo estuvo concentrado desde el primer al último minuto de juego.
Jon ORMAZABAL