GARA > Idatzia > Irrati-telebista

Custer y Pollux

Ines INTXAUSTI

Crítica de televisión

Quien tenga mi edad recordará el primer cómic nacido en Euskal Herria. Se llamaba «Euskadi Sioux». Un gran nombre que, junto a otros como Araba Saudí, previsibles y fáciles de asociar, identificaba nuestro sentido del humor con una reserva india única y reivindicable. Hoy EITB da cobijo a un programa que, seguramente conocedor del nombre del cómic, ha tenido a bien llamarse a sí mismo «Euskadi comanche». Recordando así otro territorio salvaje y también único, que lo mismo seduce que descabella y traiciona. «Euskadi comanche» es la Gran Cámara Oculta de nuestro paisito. El Gran Hermano espúreo que sale a la calle a reírse de sí mismo a través de los otros. O viceversa: a reírse de los otros, pero con dinero público. Esto no lo hacen en ningún otro lugar. Me juego el cuello a cualquier comanche que se precie. Yo misma fui víctima de una farsa auténtica (valga el oxímoron) que querían hacer pasar por inocente y bienintencionada. Cuando alguien se pronuncia bienintencionadamente, lo mejor es echar a correr. No puedo, por largo, ni debo, por el honor de la casa, relatar en detalle lo que los comancheros pretendían lograr a través de mí. Pero lo sospeché desde el primer momento cuando, enviada desde producción del programa en el nombre de EITB, me recogió una menor, jovencísima sería más exacto, al volante de un cochecillo desvencijado. Vehículo que se encontraba muy lejos de los elegantes armatostes que te mandan de cualquier otro programa para ir donde quiera que sea. Ésta es la parte más evidente y material. La que hasta un cochisse o un semínola olerían desde lejos. La otra es más sibilina. Hay que tragar mierda de caballo para saber si el enemigo acaba de pasar o lo hizo ayer tarde. El único interés que tenían en mí era esta columna. Y esta columna está en este periódico. Y este periódico está en este país. Por lo visto, resultamos graciosos a los madrileños. ¡Vaya descubrimiento! No sé si lo pillan, pero vean el programa y daré por concluido el artículo. Quién quiera reirse de sí mismo no puede ser el otro. Tiene que ser uno mismo.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo