Reunión en la Moncloa
Rafa Díez ve confirmado que el PSOE «tuvo vértigo» en el proceso
GARA | GASTEIZ
El grupo parlamentario Ezker Abertzalea en Gasteiz comparecerá hoy en rueda de prensa para valorar la reunión celebrada en el Palacio de La Moncloa por José Luis Rodríguez Zapatero y Juan José Ibarretxe. La falta de novedades en los mensajes de ambos dirigentes políticos hizo que se cumplieran los pronósticos expresados por la mañana por otro dirigente de la izquierda abertzale, el secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga.
Entrevistado por ETB y preguntado por el previsible rechazo de Rodríguez Zapatero al planteamiento de Ibarretxe, luego confirmado tras la reunión, Rafa Díez quiso poner el acento en que «la cuestión no está en el `no' de Zapatero, sino en qué hacemos en Euskal Herria» con el objetivo de lograr «un marco democrático en este país».
Para el dirigente sindical independentista, «la cuestión está en qué hacemos en Euskal Herria para condicionar realmente la postura de un Gobierno español que sigue planteando la Constitución y el marco actual como la cárcel política de este país, que sigue negando la existencia de Euskal Herria como nación y el derecho a decidir».
En la entrevista, Rafa Díez incidió en la idea de que «la pelota, más que en el tejado del Estado español, sigue estando en el de la sociedad vasca a la hora de construir una solución y un marco democrático».
Para el líder de LAB, que dejará el cargo en el Congreso que se celebra este próximo fin de semana, se puede extraer una conclusión de la posición del líder del PSOE. Dijo que evidencia que fueron Zapatero y su partido quienes tuvieron «vértigo» en el proceso de negociación que tuvo las conversaciones de Loiola como escenario central, aunque luego el diálogo continuara hasta mayo de 2007.
«Tuvieron vértigo de abordar unos contenidos políticos, los que estaban reflejados en Loiola», dijo Rafa Díez, para quien es evidente que en aquellas conversaciones afloraron «mimbres para encauzar la negociación y el acuerdo político».
En este punto, el líder de LAB reivindicó el valor de aquellos «contenidos» para avanzar hacia un escenario de soluciones. «Siguen y seguirán siendo elementos que pueden servir», manifestó Díez Usabiaga.
Electoralismo
El documento remitido por Ibarretxe a Zapatero como base para un eventual acuerdo recoge precisamente uno de los borradores de Loiola, pero sin incluir ninguna de las demandas de concreción hechas por la izquierda abertzale y que en noviembre de 2006 se negaron a incluir PSOE y PNV. Por ejemplo, la necesidad de que se citara expresamente la independencia como una de las opciones materializables si fuera el deseo mayoritario de la sociedad vasca.
Tras difundirse públicamente este documento enviado por el lehendakari a La Moncloa, y que el presidente español despreció ante los medios en su comparecencia de ayer, la izquierda abertzale indicó en una nota de prensa que la propuesta que ahora intenta liderar Ibarretxe «ni es novedosa ni es suya».
El independentismo, que lleva muchos meses alertando de un posible «fraude» entre PSOE y PNV, recordó que ambos partidos ya frustraron un acuerdo político que habría resuelto al conflicto al negarse a concretar el borrador ahora repescado.
El pasado sábado, miembros de la izquierda abertzale reivindicaron que «la oportunidad para un verdadero cambio está abierta», pero incidieron en que ésta pasa por su Propuesta para un Marco Democrático, que contempla una autonomía a cuatro con derecho a decidir. Y recordaron que «el no que dieron PNV y PSOE a estas propuestas dejó bien a las claras cuál era la verdadera intención de ambos partidos: en ningún caso construir un nuevo marco democrático, sino intentar destruir a la izquierda abertzale».
Según su diagnóstico, el objetivo actual de propuestas como la de Ibarretxe a Zapatero es diluir «las ansias mayoritarias de cambio político de este pueblo en una simple reforma estatutaria. Y el PNV sabe que eso sólo lo puede hacer con una izquierda abertzale débil», remarcaron en una rueda de prensa que se llevó a cabo en Donostia.
Lokarri reclama la consulta
Por otra parte, el colectivo Lokarri, que lleva meses haciendo campaña por las consultas en Gasteiz, Iruñea y Madrid, indicó tras la reunión que «ha llegado el momento» de que Ibarretxe la convoque.
Lokarri censuró especialmente que Zapatero no pusiera alternativas encima de la mesa en la reunión de ayer, y criticó que al reclamar consenso previo en Euskal Herria «está tratando de imponer una condición de imposible cumplimiento», ya que sin apoyo del PP y el PSE, «que se niegan a iniciar un proceso de diálogo que culmine en un acuerdo, es imposible plantear una propuesta que cuente con un consenso amplio».
Zapateroren ezetza egiaztatu ondoren, beste urrats batzuk emateko ordua dela uste du bai Ibarretxeren gobernukide den EAk, bai Aralarrek. Azken horren ustez, zehazki, alderdien artean herri galdeketa «prestatzen hastea lehentasunezkoa da».
Eusko Alkartasunaren partetik, mezu hau helarazi zioten PSOEri, bilera zertan geratu zen ikusi ondoren: «Euskal gizarteak ez du onartuko berriro ere 2005. urtean atean emandako danbatekoaren gisakorik». Juan José Ibarretxek Moncloan esandakoarekin bat egin, eta PSOEk eta Gobernu espainolak «beren alderdiko interesak» lehenesten dituztela salatu zuen EAk.
Horiek horrela, orain Gasteizko Legebiltzarraren txanda dela esan zuen Unai Ziarreta buru duen alderdiak: «Bakerantz eta normalizaziorantz doan bidean atzera bueltarik izan ez dadin eragin behar du, gizartea mugiarazteko ekimenak bultzatuz eta hiruko Gobernuaren ibilbide orria garatuz».
Aralarrek, bestalde, Aintzane Ezenarro legebiltzarkidearen esanetan, argi ikusten du Madrilgo Gobernuaren aldetik akordiorako borondaterik ez dela: «Zapatero presidenteak jada erakutsi du ez duela eztabaida politikoan sartu nahi». Horren aurrean, euskal alderdiek «galdera, prozesua eta ondorengo kudeaketa nolakoa izango den zehazten joan behar» dutela aldarrikatu zuen. «Bidea zein izango den argitu, gizarteak hala eskatzen duelako», zehaztu zuen.
La reunión comenzó a las 10.00 y fue más prolongada de lo habitual, cerca de dos horas y media. Zapatero quiso matizar que buena parte de este tiempo lo pasaron hablando de cuestiones como el proyecto del Tren de Alta Velocidad o la innovación.
El propio Zapatero salió esta vez ante los medios, en lugar de la vicepresidenta o del responsable de Comunicación, como ha ocurrido en otras ocasiones. Pero su explicación inicial fue mucho más escueta que la de Ibarretxe. También sonrió menos a la entrada.
Mikel ARANA
Portavoz de EB
El presidente español puso énfasis y fue reiterativo al afirmar que es la novena vez que recibe a Ibarretxe en estos cuatro años, y que lo ha hecho en todo tipo de escenarios. El lehendakari, por contra, criticó que llevaba casi nueve meses tocando a su puerta.
Joan RIDAO
Portavoz de ERC en el Congreso