El presidente de Taiwán inicia una «nueva era» en las relaciones con China
GARA |
El presidente de Taiwán, Ma Ying-jeou, inauguró ayer una nueva era política en la isla con un llamamiento a mejorar los lazos con China, pero sin convertirse en un apéndice político de Beijing.
«El mantenimiento de la paz y la estabilidad en el Estrecho de Formosa es nuestro principal objetivo. Hoy se inicia una nueva era de paz», manifestó.
En su opinión, China y Taiwán «pueden encontrar un sendero de paz». El nuevo mandatario, de 57 años e hijo de un dirigente del Partido Kuomintang (KMT), defiende la unión con China «en democracia y libertad», por lo que, en el plano diplomático, busca «una tregua» después de ocho años de tensiones.
Su llegada al poder ha desencadenado grandes expectativas de mejora económica por medio de la llegada de turistas chinos y el estrechamiento de los lazos económicos. Los taiwaneses esperan el inicio de vuelos directos con China en julio.
El primer paso de Ma hacia la mejora de las relaciones será el viaje del presidente de su partido, Wu Po-hsiung, a Beijing la próxima semana. Wu tiene previsto entrevistarse con el presidente Hu Jintao. Será la primera vez en más de 60 años que un jefe del KMT se reúne con el Partido Comunista.