Nueva aventura de Bruesa GBC en la mejor liga de Europa
«Nuestro objetivo es seguir subiendo en la Liga ACB»
Presidente de San Sebastián Gipuzkoa basket
No necesita presentación, porque ya se presenta él solo. El estandarte del ascenso y consolidación de Bruesa GBC en la Liga ACB, ni tiene vacaciones, ni se toma un respiro. Entre felicitaciones y entrevistas, el presidente de la máxima entidad baloncestística de Gipuzkoa empieza a armar el equipo para el año que viene. Trabajo y más trabajo. Todo para conseguir «el equipo más competitivo posible».
Arnaitz GORRITI | DONOSTIA
Solicitado por todos, Miguel Santos encuentra espacio para recordar, responder y, de vez en cuando, respirar. La temporada 2008/09 ya ha empezado. Mantenerse en la Liga ACB lo vale.
¿Esperaba ascender tan pronto?
Yo soy optimista, pero ni voy a presumir por el ascenso ni me hubiese rasgado las vestiduras por no lograrlo. Estaríamos trabajando de otra forma, pero a nivel económico, deportivo y social, siempre al máximo.
Después de la emoción, llega el trabajo. ¿Ya ha comenzado para usted la temporada 2008/09?
En el momento que ascendimos, ya ha empezado la temporada. Y el trabajo, mucho antes de ir a Cáceres, porque hemos avanzado muchísimo independientemente de en qué categoría nos encontráramos. Pablo -Navallas-, que es el responsable deportivo, había trabajado para que renovásemos a los jugadores que nos interesaban tanto para la ACB como la LEB. Hay un trabajo adelantado.
Tras lograr el ascenso no hemos dejado de trabajar. Por teléfono, regresando de Cáceres, aparte de las felicitaciones, llevaba un trabajo constante.
¿Nada de vacaciones?
La verdad es que tenemos mucho mejor encarrilado el contenido del club de cara a la nueva temporada, pero nos queda la parcela más importante, que es el tema del presupuesto ordinario. Mi obligación es dotar al club de ingredientes para hacer el mejor equipo posible. Para ello, me gustaría manejar un presupuesto que rondara los seis millones y medio de euros.
¿Cuál han manejado en LEB?
Del orden de los tres millones y medio, cuatro. Será difícil de conseguir, pero con trabajo iremos a por ello. Aquí sí que no hay vuelta de hoja. En este deporte la diferencia presupuestaria te marca los tiempos.
Por ejemplo, cuando asistí a la final de la ACB entre Tau y Barcelona, sumaba lo que había en la cancha y me salían unos 24 millones más doce o trece. ¿Cómo le voy a exigir a mi mujer que me haga una buena macedonia de frutas si sólo tengo un plátano? Para poner ingredientes hay que poner el dinero, y para ello hay que trabajar. Ya habrá tiempo para comunicar a la sociedad guipuzcoana qué tipo de proyecto deportivo y económico queremos hacer.
Cuentan a su favor la experiencia de hace dos temporadas y el canon de entrada pagado.
Sin duda. Pero luego tenemos algo muy importante: que nos hicimos sociedad anónima. ¡Lo que hubiera sido de no habernos hecho SAD! Presupuesto ordinario, canon de ascensos y descensos y además la SAD. ¡Me vuelvo loco!
Quisiera hacer hincapié en el valor que tuvo el no bajar los brazos cuando descendimos y, aun no teniendo la obligación de constituirnos en SAD, hacerlo. Hoy nos damos cuenta de su importancia. Queremos obtener el máximo dinero posible, optimizar recursos y hacer un proyecto estable.
El objetivo es mantenerse.
No voy a pronunciar esa palabra. Mi objetivo es seguir subiendo. Tenemos que conseguir que la gente quiera ver al Gipuzkoa Basket; no al Real Madrid, al Tau... que cada quince días Illunbe sea un espectáculo.
Bruesa es su sponsor, pero con la «crisis del ladrillo» y viendo los casos de Akasvayu o Murcia, ¿les puede afectar?
No tengo más que palabras de agradecimiento con Bruesa, con Antonio Pinal a la cabeza. Durante estos años han tenido una implicación bestial. A partir de ahí, me siento optimista sobre su continuidad a partir del 30 de junio, pero ahora no puedo decir si serán nuestro sponsor.
Un detalle importante: Uriz, Isaac, Panko, Hopkins y Doblas siguen. Ello supone una plantilla de perfil mayor.
Es lo que hemos aprendido de la experiencia. Tenemos casi el 50% de la anterior plantilla contratada. Esto nos da una base, pero queda mucho por hacer.
Por otro lado, renovar a Laso en enero parecía una osadía.
Es que yo creo en los proyectos a largo plazo y los éxitos a corto. Cuando contratamos a Laso le dije: «Ojalá estés un mínimo de cuatro años». ¿Por qué le renovamos? Porque creíamos que estaba haciendo una gran labor, un gran proyecto y una consolidación del equipo. El tiempo nos ha dado la razón. Los cambios no garantizan el éxito.
¡Es el año del basket vasco!
Estamos pensando hacer algo sobre este tema del basket vasco, pero el éxito es obvio.
¿Y Miguel Santos seguirá?
Cuando hagamos la primera junta de accionistas lo normal es que sea el primer presidente del consejo. Luego, a preparar el legado. Para julio podremos llevarlo a cabo.