TOUR | Undécima etapa
Arvesen aprovecha el respiro de los hombres fuertes
El corredor noruego se impuso en el emocionante sprint entre fugados, mientras el pelotón cedía casi un cuarto de hora en meta
Amaia U. LASAGABASTER | DONOSTIA
Los hombres fuertes del Tour prolongaron su descanso, algo que aprovecharon los aventureros, favorecidos además por un recorrido apto para las fugas.
Descanso de lo más relativo, vistas las medias horarias que se marcaron, pero sí el suficiente como para hablar, por fin, de una jornada de transición. La historia de los 167 kilómetros entre Lannemezan y Foix la escribió, así, la docena de corredores que marchó en cabeza durante la mayor parte del recorrido y, sobre todo, Kurt-Asle Arvesen, vencedor de la jornada. El campeón noruego pasaba así de haber visto peligrar su participación en la ronda francesa a dar a CSC su primera victoria en esta edición. Lo consiguió gracias a un ajustadísimo sprint con Alessandro Ballan y, sobre todo, Martin Elminger, que se decidió por cuestión de milímetros.
A casi un cuarto de hora llegaba el pelotón principal, con lo que no se registran cambios importantes en la clasificación general, a excepción del salto de Alexandre Botcharov, que asciende hasta la 16ª plaza. El ciclista de Crédit Agricole era el mejor situado de la fuga, aunque no lo suficiente como para que el pelotón se preocupara. De ahí que la docena de corredores que saltaba en el kilómetro 35 tuviera vía libre para acumular ventajas que superaron el cuarto de hora.
Amaël Moinard iniciaba las hostilidades dentro de la fuga, con el ascenso al Col de Portel, principal dificultad del trazado. Por detrás faltaba organización para la caza y más atrás aún, Óscar Pereiro buscaba el imposible, saltando del pelotón para viajar en tierra de nadie durante unos cuantos kilómetros.
El de Cofidis y el de Caisse d'Eparne corrieron la misma suerte: ambos aguantaron un buen rato, pero acabaron siendo neutralizados, por el grupo de escapados y por el pelotón principal, respectivamente.
A siete kilómetros de meta, Arvesen y Elminger, posteriormente Ballan, y en última instancia Moerenhout, tomaban el relevo de Moinard en cabeza de carrera. El cuarteto protagonizó dos kilómetros finales llenos de tensión, que no se despejó hasta que la foto-finish confirmó la victoria del noruego.
«Sin duda, es la victoria más importante de mi carrera -reconoció Arvesen-. Ganar en el Tour con el maillot de campeón de Noruega es lo más importante que he hecho». El rodador de CSC explicó que se sentía «muy fuerte al final. No he salido en una posición muy buena para el sprint, pero una vez lanzado, me he sentido bien y ha sido suficiente, aunque sólo haya sido por unos centímetros. He tenido suerte».
Aficionados heridos
No la tuvo un grupo de aficionados, dos adultos y dos niños, que, pese a encontrarse detrás de las vallas, fueron arrollados por un coche de la carrera en zona de meta. Según los servicios de urgencias, todo habría quedado en algunas contusiones.
El Tour se reanudó con la noticia del segundo positivo de esta edición. En este caso fue Moisés Dueñas, también por EPO, en el control al que se sometió en la cuarta etapa. Barloworld, que sigue en carrera -y que ayer perdió también a Cárdenas y Longo, víctimas de sendas caídas-, expulsó inmediatamente al corredor que, como sucediera anteriormente con Manuel Beltrán (Liguigas), fue interrogado por la Gendarmería. Además, según reveló el equipo, la Policía descrubrió en la habitación de Dueñas sustancias prohibidas «que no fueron suministradas ni prescritas por el doctor del equipo».
GARA