Al menos dos mujeres han sido agredidas este fin de semana por sus respectivos compañeros en la capital vizcaina. Sus agresores, dos hombres de 33 y 28 años, han sido detenidos y puestos a disposición judicial.

La primera de las detenciones se produjo el domingo en Bilbo. El hombre de 33 años fue acusado de violencia contra las mujeres, según informó ayer el Departamente de Interior de Lakua. Las mismas fuentes informaron de que el arrestado golpeó «brutalmente» a su compañera sentimental y la dejó incosciente. Los hechos tuvieron lugar en la madrugada del domingo, en el domicilio que comparten ambos con otras personas.

A su llegada al lugar de los hechos, agentes de la Ertzaintza encontraron a la mujer tendida en el suelo de su vivienda y con dificultades para respirar. La víctima presentaba la cara hinchada y amoratada y diversas partes del cuerpo con golpes y arañazos.

La Ertzaintza acudió a la vivienda de la capital vizcaina al ser alertada por una de las personas que reside en el mismo domicilio que la pareja y fue testigo de la agresión.

«Reanimada en su vivienda»

Los agentes solicitaron la presencia de efectivos sanitarios al conocer la situación en la que se encontraba la víctima. A su llegada, la mujer se encontraba sin respiración, por lo que los servicios de emergencia tuvieron que reanimarla y trasladarla posteriormente a un centro sanitario, donde quedó ingresada en la unidad de observación del hospital.

Por su parte, tras la detención el arrestado fue conducido a dependencias policiales, y estaba previsto que fuese puesto a disposición judicial en las próximas horas.

Por otra parte, la Policía Municipal arrestó el domingo a otro hombre de 28 años en Bilbo, identificado como J.J.Q.C., acusado de un delito de violencia contra las mujeres.

Según informó la Policía Municipal en una nota de prensa, a la una de la madrugada un agente libre de servicio que circulaba por la calle Telleria observó cómo un joven le daba «un fuerte tortazo» en la cara a una mujer, de 26 años, y seguidamente otro golpe que la hacía caer al suelo.

Aunque tras la agresión ambos se fueron en un vehículo que había llegado a recogerlos, los agentes de la Policía Municipal, que habían sido alertados de lo ocurrido, interceptaron el coche en que viajaban ambos y procedieron a la detención del joven acusado de violencia sexista.