En unas fiestas de La Blanca marcadas por el complicado contexto político que vive este país, la izquierda abertzale de Gasteiz anunció ayer que tendrá una presencia activa en esta próximas jornadas festivas y que, un año más, el próximo lunes a la hora del txupinazo estará presente en la balconada de San Miguel «al objeto de dar cauce a las reivindicaciones de la sociedad gasteiztarra, en general, y de la izquierda abertzale en particular».

En una comparecencia ante los medios, Eli Etxeberria e Ibon San Saturnino anunciaron que, junto a ellos, acudirán a la balconada Aitor Bezares, Iñaki Usategi y Amparo Lasheras.

En su alocución, hicieron balance del momento político y recordaron la «situación de excepción sin precedentes» que padece Euskal Herria, «en la que vemos cómo de un día para otro cualquier cosa vale para ir contra la izquierda abertzale». Frente a ello, ««a pesar de todas las dificultades y contra ellas», anunciaron su intención de estar presentes en las fiestas de Gasteiz, «participando como agentes activos».

Respecto a la actuación municipal de cara a las fiestas, valoraron que ha sido similar a la de años anteriores, y criticaron que «de nuevo, en lugar de optar por unas fiestas populares, la programación ha quedado en manos de políticos profesionales». A este respecto, censuraron que «el PSE, al frente del Ayuntamiento, no ha hecho ninguna campaña en favor del euskara para que esté presente en fiestas por todos los rincones», y también llamaron la atención de que no se haya llevado a cabo ninguna medida desde el consistorio para evitar las agresiones sexistas.

«No todo vale»

«Echamos en falta campañas de sensibilización para fomentar actitudes que no toleren este tipo de comportamientos, sobre todo viendo lo que ha sucedido en fiestas de otros lugares» agregaron, señalando que en esta materia hay un gran trabajo por hacer y que se debería expresar el compromiso de dar respuesta ante cualquier agresión y actitud sexista, ya que «en un ambiente de fiestas, no todo vale».

San Saturnino y Etxeberria recordaron que la izquierda abertzale lleva años reivindicando un txupinazo y unas fiestas participativas y populares, con los políticos en segundo plano y dando el protagonismo a la ciudadanía y los organismos sociales. En este sentido, opinaron que «algo ha cambiado», ya que no serán los concejales quienes lancen el txupinazo pero, al mismo tiempo, pusieron sobre la mesa la «trampa» que supone el que sean los ediles quienes decidan quién lo lanza.

En cualquier caso, anunciaron que «vamos a seguir trabajando para conseguir unas fiestas populares» y que insistirán en reclamar una comisión de fiestas. Además, señalaron que seguirán reivindicando «que se potencie la cultura euskaldun, dando prioridad al euskara, asegurando que la ikurriña esté presente en todos los actos, que no se toleren actitudes machistas, y que las fiestas sean populares, participativas y ateas».

En esta línea, hicieron un llamamiento a participar en las movilizaciones organizadas durante las fiestas.