Pegados a la pantalla
En la misma balanza
Asier AIESTARAN
Los pelos como escarpias. Se me pusieron cuando el bueno de Samuel Sánchez rompió a llorar en el podio al recordar a su madre, fallecida hace exactamente ocho años. Asturiano nacido en Oviedo -a mucha honra y por mucho que alguno se empeñe en encontrarle sangre vasca-, su relación con Euskal Herria ha sido muy estrecha en los últimos años y a nadie se le escapa que se trata de un ciclista muy querido entre nosotros. De cualquier manera, es igualmente cierto que las lágrimas de cualquier otro ciclista también hubieran llegado a los corazones de muchos aficionados. Y es que, aunque las comparaciones siempre son odiosas, uno se resiste a poner en la misma balanza un deporte como el ciclismo, con las cargas de esfuerzo y sufrimiento que conlleva, y el tiro con carabina de aire comprimido, por poner un ejemplo. Por cierto, ¿alguien sabe para qué sirven los Post-It que se ponen en las gafas?