Los libros digitales, un negocio con futuro que beneficia a los autores
GARA | SANTANDER
El negocio de los libros digitales está triunfando en muchos países, aunque en el Estado español las editoriales no se hayan lanzado todavía, y supone una gran ventaja para el autor, que con las nuevas plataformas recibe aproximadamente un 80 por ciento de los beneficios de la venta, según el editor digital Javier Celaya.
«Las nuevas tecnologías permiten además a las editoriales un incremento de las ventas en formato papel», afirma Celaya, socio fundador del portal cultural Dosdoce.com y vicepresidente de la Asociación de Revistas Digitales de España (ARDE). Harper Collins, por ejemplo, ha aumentado un 30 por ciento sus ventas gracias a «permitir a sus usuarios leer el libro entero en la red 30 días antes de que saliera al mercado», explica. A esta estrategia se suma la creación en Internet de una red social de escritores y la venta de los libros en distintos formatos: normal, de bolsillo y digital.
Otro dato significativo que aportó Celaya en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo es que el 6 por ciento de las ventas de la editorial Hachette en 2007 fueron libros electrónicos.
Amazon, por otro lado, ha vendido en un año cerca de un millón de Kindles, un dispositivo portátil que permite almacenar y leer libros. Todavía no se comercializa en Europa, pero se puede adquirir a través de la web. Este e-book no está liberado, por lo que hay que descargar los libros en Amazon, que ha seguido el mismo tipo de lanzamiento que Apple con su IPod.
En el Estado español se está estudiando este nuevo mercado, aunque según el editor digital Javier Celaya «las editoriales españolas innovan muy poco».
En cuanto al reparto de beneficios por la venta de los libros, las reglas del juego cambian con las editoriales digitales. «Este cambio favorece al autor», afirma el vicepresidente de ARDE. Con el modelo tradicional de negocio el autor recibe un 10 por ciento de los beneficios, y el resto se reparte entre el editor, el distribuidor y el punto de venta, mientras que con las nuevas plataformas de edición recibe un 80 por ciento de los mismos. Lulu y Bubok son dos de estas plataformas que obtienen de la venta de los libros sólo un 20 por ciento de los beneficios gracias a que «se ahorran costes de impresión y distribución».