El Numancia paga la cláusula de Goiria y obliga a los armeros a fichar otro atacante
A.U.L. | EIBAR
Ni Elche, ni Hércules, ni siquiera Eibar. Numancia será el equipo en el que milite Asier Goiria esta temporada, después de que el club castellano abonase ayer los 300.000 euros de su cláusula de rescisión.
Pese a que la marcha del delantero, fuera cual fuera su destino, parecía cantada, su confirmación convierte en necesidad lo que hace un día no pasaba de intención, fichar a un delantero. Según explicaba Anton Martinena, relevo temporal de Javi Pérez en estas lides, ya hay mucho trabajo hecho, «pero ya sabemos cómo son estas cosas. Lo que parece encauzado se rompe, lo que parece difícil se soluciona...». Así que, como siempre, habrá que «esperar hasta el último momento», aunque en este caso parece seguro que de aquí al lunes la plantilla contará con un nuevo integrante. O incluso con dos. «Esa posibilidad existe», confirma Martinena.
Carlos Pouso, por su parte, reconoció que la pérdida es sensible, pero se «alegra por Asier» y se muestra «igual de dispuesto a trabajar con los jugadores que tenemos ahora».
El técnico, por otro lado, no introducirá cambios en el grupo de expedicionarios que parten a primera hora rumbo a Alicante. «Por un lado éramos 19, precisamente porque Goiria tenía algunos problemas, así que nos quedamos 18; y por otro, el resto de la plantilla está con lesiones y con problemas», recordó.
El Eibar, por último, fichó ayer por dos años al centrocampista gasteiztarra, procedente del Girona, Manu García Alejandro, aunque lo cedió al Real Unión.