¿Quién es aquí el pirómano?
Espectáculo camino de la Casa Blanca
Yo sangraba demasiado para poder ruborizarme
La frase con la que Gongeta titula este artículo pertenece a una poesía de Leïla Djabali, torturada en Argelia por militares franceses. Testimonio tristemente similar a los de los detenidos vascos en la actualidad. La tortura busca establecer quién detenta el poder y es, por tanto, con la complicidad de todos los agentes implicados en el ejercicio del poder que se puede desarrollar con total impunidad. Siguiendo a Foucault, Gongeta concluye que «la tortura es intolerable porque además de injusta, las autoridades políticas la hacen invisible a la sociedad»
Arnaldo Otegi, a la calle
Arartekoa: herriaren defendatzailea?
Berriro eguneroko kondenara
Horrela, gurpil horretan sartuta pasatzen ditugu urteak, gure bizia produkzio etengabe bihurturik; etxetik lanera eta lanetik etxera. Geure buruari galdetu ere ez diogu egiten zer egin nahiko genukeen
Hay que rescatar el romanticismo
Un devastador vacío existencial marca a millares de personas que tratan de llenarlo mediante el consumo desenfrenado¡A por ellos!
En cuanto a los malos tratos y asesinatos de género, hablan de la violencia machista, pero no de que ellos la sustentan con el incumplimiento de sus propias leyes y con una situación de no igualdad Nos negarán el pan y la libertad diciendo que miremos a otro lado y no critiquemos sus incapacidades para la única función que se les encomienda, diálogo y gestión