Las tropas rebeldes de Laurent Nkunda se retiraron de uno de los principales frentes en el este de la República Democrática de Congo (RDC), a cien kilómetros de Goma, en el que cascos azules de la misión de la ONU para la RDC (Monuc) abrieron fuego contra los milicianos progubernamentales Mai-Mai.

El martes, los rebeldes decidieron retirarse para «dar una oportunidad a la paz» y consolidar los «esfuerzos de mediación» del enviado de la ONU. Pidieron a la Monuc que «asumiera la seguridad de esas zonas de separación y garantizara que ninguna otra fuerza las ocupara».

Unas horas después, un portavoz rebelde acusó al Ejército, a los milicianos Mai-Mai y a los rebeldes hutus ruandeses de haber vuelto a las zonas evacuadas. En ese sector, los cascos azules abrieron fuego contra los milicianos Mai-Mai en respuesta a un ataque contra dos acorazados de la ONU.