Emilio y Garitano regresan al grupo junto con el «fichaje de otoño» Fagoaga
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
Dentro de lo complicada que está siendo la semana para José María Salmerón, el técnico almeriense tuvo ayer la buena noticia del regreso de los lesionados Gaizka Garitano y Emilio Sánchez al grupo, así como la recuperación de Iban Fagoaga, que completó su primer entrenamiento desde su lesión en pretemporada.
A pesar de que la participación del defensa de Bera este domingo es muy poco probable a pesar de que a día de hoy Salmerón sólo cuenta con cuatro defensas, Kalderon, Pablo Casar, César y Raúl Llorente, el regreso de los dos centrocampistas sí que da cierto aire al equipo en una posición muy debilitada.
Tanto Garitano como Cabrera, que ya tuvo minutos en Jerez, podrían ser la pareja de Astudillo en el medio centro, mientras que Emilio tomaría esa responsabilidad organizadora que tanto se ha echado en falta en su ausencia. El albaceteño señaló que ha sentido «impotencia y rabia» por no haber podido estar junto a sus compañeros en los partidos de las últimas jornadas, saldadas con muy malos resultados para el equipo.
«Lo ves todo desde arriba y, sentado en la tribuna de Mendizorrotza, se padece mucho más que en el campo, aunque, a partir de ahora, habrá que cambiar el chip para no sentir presión alguna en los próximos encuentros. Voy a tratar de ser un jugador más de la plantilla, aportando todo lo que pueda para sacar adelante al equipo junto a todos mis compañeros», señaló uno de los jugadores más importantes del Alavés.