El Congreso Ibérico del Agua recalca en Gasteiz la utilidad de la participación ciudadana
GARA |
Más de la mitad de los ríos y lagos de la Península ibérica presentan un mal estado ecológico. Una preocupación a la que se suma el hecho, más grave si cabe, de que en los últimos 25 años los caudales de los ríos se han reducido en un 20%. Son sólo dos de las conclusiones que ayer se pusieron sobre la mesa al hacer balance del VI Congreso Ibérico sobre Gestión y Planificación del Agua, que desde el jueves se ha venido celebrando en la capital gasteiztarra. Una cita que también ha advertido sobre la insuficiente participación ciudadana en el debate en torno al uso del agua.
Numerosos especialistas han participado en este encuentro anual organizado por la Fundación Nueva Cultura del Agua, con sede en la Universidad de Zaragoza. «Los usuarios del agua tienen que ser conscientes y resposabilizarse del deterioro que las extracciones y vertidos de aguas residuales producen en el medio ambiente acuático. Ya se sabe, el que contamina, paga», expuso Leandro del Moral, presidente de la entidad organizadora. Sin embargo, también aludió a la otra implicación ciudadana, la del derecho a la participación.
Participación obligatoria
«La Directiva Marco del Agua establece la obligación de desarrollar procesos participativos activos y reales. Existe al respecto gran heterogeneidad en esos procesos de participación, pero vemos que muchos de ellos no están cumpliendo suficientemente los niveles y objetivos que establece la Directiva», cuestionó.
«Es necesario financiar la participación de las organizaciones ciudadanas sin ánimo de lucro -añadió-, y convencer a las autoridades de la utilidad del proceso de participación social».