Condenan al joven de Gares a dos años de prisión tras la acusación de los forales
GARA |
Kiko Alvarez, el joven de Gares acusado de haber agredido a un policía foral, ha sido condenado por el Juzgado de lo Penal número 3 de Iruñea a dos años de prisión y a una multa económica de diez euros diarios durante cuatro meses. La sentencia ve probado que el joven le pegó una patada al policía que protegía a la alcaldesa de Gares en fiestas de la localidad en 2006. Dado que el joven no tiene antecedentes, no ingresará en prisión, aunque continuará reclamando su inocencia.
En el juicio al que fue sometido Kiko Álvarez, la entonces alcaldesa, Eva Erro Ochoa (de la Agrupación Ximénez de Rada, «cercana a UPN»), negó que le hubieran intentado agredir y declaró no haber visto que ningún policía hubiese sido golpeado. Según el movimiento pro-amnistía, además, la alcaldesa «dijo no recordar que Kiko Álvarez se encontrase en el lugar de los hechos».
Campaña de solidaridad
«Una vez más, un tribunal de justicia ha dado mayor importancia a las declaraciones policiales que a las efectuadas por ciudadanos y por la propia alcaldesa, otorgando impunidad absoluta a la Policía Foral», resalta este movimiento pro-amnistía. «Esta es la política represiva diseñada por UPN, que trata de hacer desaparecer todo aquello que huela a disidencia política», denuncian.
Los hechos se remontan a julio de 2006, cuando se celebraban las vísperas festivas en Gares. Al parecer, un grupo de vecinos protestaba contra la política municipal de la alcaldesa, que decidió llamar a la Policía Foral. Ésta acudió al lugar fuertemente armada. Todo ello desembocó en incidentes que llegaron a los tribunales.
La acusación dirigida contra este joven dio pie a una intensa campaña de solidaridad, en la que cientos de vecinos de Gares se movilizaron en varias ocasiones con lemas como «Todos somos Kiko». Tras varios dimes y diretes judiciales, se ha dictado esta sentencia.