La ayuda a medios euskaldunes cae de 310.000 a 9.567 euros en Nafarroa
Topagunea, la federación que reúne a los medios euskaldunes en Nafarroa, se muestra decepcionada por que «las palabras de los representantes de varios grupos han quedado va- cías». Sin apenas debate y de un plumazo, los presupuestos aprobados el martes por UPN, CDN y PSN liquidan prácticamente la subvención públicas a radios, televisiones o revistas en euskara. El recorte es del 96,7%.
Ramón SOLA |
Miguel Sanz lo anunció en el inicio de este curso, en la misma entrevista en que arrancaba la carrera para la ruptura entre UPN y PP. Dijo que consideraba que el dinero dedicado al euskara era «excesivo» y que veía mejor destinarlo a lo que denomina como «lenguas comerciales». Y el mejor exponente de esta decisión política es la anulación práctica de la ayuda presupuestada para medios de comunicación en euskara.
Pese a lo brutal del recorte, la cuestión pasó sin levantar apenas polvareda por el Pleno del Parlamento navarro que debatió y aprobó los presupuestos en las sesiones del lunes y el martes. Pero los números lo dicen todo: la partida desciende de los 310.00 euros presupuestados para 2007 a sólo 9.567. Un recorte del 96,7%.
Los medios euskaldunes resaltan que con esa cantidad ni siquiera se logra pagar el sueldo anual de un trabajador de los cerca de 60 con que cuentan todos estos medios.
Diez años de recortes
La supresión fáctica de esta partida pone colofón a una década de recortes paulatinos o de promesas incumplidas. Hace ahora un año, en tiempos en los que el Gobierno de Sanz escenificaba una posición menos negativa hacia el euskara y que adornaba con la creación de Euskarabidea, se presupuestaron 310.000 euros para estos medios. Sin embargo, a mitad de año la partida quedó bloqueada con la excusa del recorte de ingresos fiscales derivado de la crisis económica, como ocurrió con muchas otras del Instituto Navarro del Euskara. Entrado ya noviembre, su director, Xabier Azanza, anunciaba que se había logrado recupe- rar parcialmente esta cantidad, aunque por el camino se habían quedado 70.000 euros (el 23%), ya que sólo se destinarían finalmente 240.000. Este recorte dejó en entredicho la defensa hecha por Euskarabidea de estas ayudas para 2008, que en inicio sí contemplaban un interesante aumento.
Anteriormente, sin embargo, desde el año 1999 se venían produciendo constantes restricciones, que habían acumulado un descenso del 16% hasta 2008.
Los recortes de esa época o el incumplimiento de este ejercicio quedan ahora, lógicamente, casi como un incidente menor visto el presupuesto para 2009.
Cinco ofertas en saco roto
Topagunea ha expresado en una nota su frustración por el resultado del debate presupuestado: «Se han cumplido las peores expectativas». Y especialmente después de que el pasado día 18 acudiera a una sesión de trabajo a puerta cerrada en la Comisión de Educación del Parlamento en la que escuchó «por varios grupos» bonitas palabras que «han quedado vacías».
«En esa comparecencia se hicieron cinco demandas que se pueden resumir en una: pedimos que los medios sean tratados dignamente -explica la federación euskaldun-. Para ello se requiere dotar los presupuestos con cantidades que respondan a las necesidades reales, publicidad institucional como cualquier otro medio, asignar a Euskarabidea funciones y presupuesto adecuado para realizar su trabajo y crear un marco de colaboración estable entre el Gobierno y los medios. Junto a estas demandas, ofrecimos colaboración. A todo esto le ha dicho que no el Parlamento».
El desprecio al euskara apareció de modo indirecto en el discurso navideño del presidente del Gobierno navarro, Miguel Sanz. Citó entre los objetivos de su ejecutivo potenciar idiomas extranjeros y lo justificó con este argumento: «La lengua es, antes que nada, nuestro más importante elemento de comunicación». Una premisa que evidentemente para el líder de UPN no cumple el euskara.
En el año que termina, además de acometer un recorte económico sin precedentes a la dotación para política lingüística, el Gobierno navarro ha logrado atraer al PSOE a su posición para paralizar cualquier retoque en la zonificación de la Ley del Vascuence y ha dado nuevos pasos hacia la implantación del denominado modelo TIL en la educación, en un intento aparente de relegar el euskara en favor del inglés. Además, ha aprovechado el argumento de la crisis económica para eliminar, recortar o demorar algunos proyectos de Euskarabidea ya presupuestados, con lo que ha dejado tocada a esta institución que apenas tiene un año de vida.
En su intervención navideña, Sanz saludó la nueva situación política creada por la alianza entre UPN y PSN porque permite que «haya más respaldo al Gobierno de Navarra». Lo valoró positivamente aun admitiendo que «hay algunos sinsabores también, pero vaya lo uno por lo otro». Fue una clara alusión a la ruptura UPN-PP
Pese a ello, Sanz también se mostró crítico con la demora del Gobierno estatal en firmar el convenio de financiación del TAV. Hizo saber a José Luis Rodríguez Zapatero que hasta ahora «hemos actuando con paciencia, pero a ver si este año está a la altura». «Necesitamos no perder ese tren, no podemos quedarnos aislados, atrasados», argumentó.
La viabilidad de muchos de los 30 medios euskaldunes en Nafarroa, como algunas radios locales, ha quedado seriamente tocada tras esta medida. Algunos cuentan con un amplia trayectoria al servicio de los euskaldunes, incluso con décadas de trabajo acumulado en más de un caso. El recorte impulsado por UPN, CDN y PSN les aboca ahora a la autogestión... o a la desaparición.
Las cifras dan la medida del problema, incluso a nivel laboral. En esos 30 radios, televisiones o publicaciones trabajan ahora 60 profesionales, a los que cabe sumar 300 colaboradores. Atienden a 150.000 navarros que no cuentan con medios públicos en euskara.
