El Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) absolvió ayer al ex presidente de Serbia Milan Milutinovic en su primera sentencia sobre los crímenes de guerra contra la minoría albanesa en Kosovo en 1999. El TPIY exculpó a Milutinovic al estimar que «no tenía control directo» sobre el Ejército, cuya dirección ejercía Slobodan Milosevic, y que no ha quedado probada su estrecha amistad.

Considerado por los jueces el brazo derecho de Milosevic, el viceprimer ministro Nikola Sainovic fue condenado por su implicación directa en la expulsión de 700.000 albaneses y su mando en el Ejército a 22 años de prisión, pena impuesta también a dos ex generales. Otros dos militares fueron sentenciados a 15 años de prisión.