Mendizorrotza Al Glorioso se le escapan dos puntos
Desprecia una tabla de salvación
La estrategia le quitó en los minutos 86 y 88 lo que le había dado al final de la primera parte a un Alavés que echó por la borda el buen trabajo realizado en la primera hora de juego, en la que entre Moreno y Pino Zamorano dieron vida a un vulgar Zaragoza
DEPORTIVO ALAVÉS 2
REAL ZARAGOZA 2
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
Definitivamente, el Alavés parece haberle cogido el gusto al sufrimiento y ayer desperdició una oportunidad inmejorable de dar ese paso tan necesario para ahuyentar los fantasmas del descenso. Con 2-0 en el marcador de Mendizorrotza, el resto de resultados favorables, el Zaragoza muerto y habiendo conseguido parar absolutamente el juego, Moreno y Pino Zamorano quisieron ser protagonistas de un partido en el que no habían aportado nada positivo y el jugador con su absurda expulsión y el colegiado con su nefasta actuación, cambiaron un choque encarrilado en el que el equipo maño rescató un punto.
La estrategia, que se había convertido en una posible tabla de salvación para los albiazules, se convirtió en el elemento determinante del partido y terminó quitándole lo que le había dado. Y es que, con los problemas de generar jugadas de peligro que está teniendo, la estrategia, bien trabajada, se ha convertido en un buen recurso, pero todos los equipos de Segunda recurren a este tipo de jugadas y a un vulgar Zaragoza, los goles de Ewerthon y Arizmendi en apenas tres minutos les sacaron las castañas del fuego tras estar al borde del k.o.
Pese a la necesidad de ambos de buscar la victoria para lograr sus objetivos, tanto Alavés como Zaragoza renunciaron a la profundidad por bandas, con lo que el juego durante casi toda la primera parte se desarrolló en el centro del campo, donde Emilio y Garitano sujetaron perfectamente al equipo, a pesar de que las mejores oportunidades correspondieron al Zaragoza, en un mal despeje de Bonis, en un cabezazo de Caffa en el segundo palo y en una falta que el mismo protagonista estrelló en la escuadra del portero francés.
Sin embargo, al borde del descanso, Javi Guerra se encontró un balón muerto dentro del área en uno de los múltiples corners que dispuso el equipo y mandó al Alavés al descanso con ventaja, algo que no se conocía en Mendizorrotza desde hace demasiado tiempo.
Emilio parece sentenciar
El Zaragoza apenas tuvo capacidad de reacción, ni desde el campo ni desde el banquillo y Emilio puso la guinda a su gran partido con un gol desde fuera del área que parecía sentenciar el partido.
Después de abrir, brecha, el Alavés hizo lo más difícil, ya que en pleno show de Pino Zamorano, consiguió matar el partido, sin que se jugaran dos minutos seguidos, aunque para ello Juanjo y Garitano tuvieron que jugarse su físico.
Incluso con uno menos por la absurda expulsión de Moreno, el equipo gasteiztarra aguantó al Zaragoza sin excesivos problemas, pero la estrategia esta vez jugó en contra e hizo que los puntos volaran de Gasteiz.
Javi López quiso que su discurso girara una y otra vez sobre el buen papel que el equipo hizo durante 60 minutos, tratando de pasar por encima de la absurda y criticable expulsión de Moreno. «Evidentemente, hemos perdido dos puntos al final. El partido lo hemos jugado como queríamos y lo hemos hecho realmente bien. Cuando hemos estado con once jugadores el equipo ha estado muy cerca de lo que buscamos como equipo. Hemos estado intensos, le hemos metido ritmo y hemos hecho un gran partido durante una hora.
Aunque no quiso incidir demasiado en la desafortunada acción del almeriense, Javi López explicó que «esta vez no hay ningún reproche al colegiado, no tiene sentido seguir en una acción de ese tipo. Hay que jugar al fútbol y dejarse de puñetas. El gol nos sentó mal y en dos acciones a balón parado nos han birlado dos puntos. Creo que el ambiente que podamos tener, que te sabe mal que hayas perdido dos puntos de esta manera, el equipo debe salir reforzado por el trabajo realizado».
Pese a la insistencia en las preguntas, «no voy a entrar a valorar si el árbitro es más o menos dialogante. No sé la conversación que han tenido pero lo que hay que hacer es jugar. No me he molestado ni en preguntarle, cómo ha sido la segunda, son situaciones que se dan pero que se pueden solucionar. El equipo ha hecho tantas cosas bien que centranos en la expulsión es pasar por alto que ante el Zaragoza hemos hecho un partido tremendo. Hoy, si ve alguien el partido, no pensaría que el Alavés es un equipo que está en descenso».
El protagonista de la jugada clave del partido trató, a su salida de vestuarios, de justificar su expulsión en la nefasta actuación de un Pino Zamorano que nadie puede llegar a explicarse cómo pudo llegar a Primera División. El andaluz se agarró al golpe en la boca que se llevó Juanjo, en las constantes faltas que recibieron por parte de los jugadores del Zaragoza. «Mejor si lo que ha sucedido está grabado. El gran perjudicado ha sido el Alavés y estoy indignado pero no puedes hacer nada contra eso», se defendió.