Asier Olano, Txaber Zabaleta, Aitzol Arrieta, Egoitz Balerdi, Jon Ezeiza, Eki Oñate, Mikel Gartzia e Iñigo Alzelai, los ocho jóvenes arrestados el martes por la Policía española en Hernani y Urnieta, agotarán hoy su quinto día en situación de incomunicación por lo que comparecerán durante las próximas horas ante el juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón. Así lo confirmó a este diario una de las abogadas de la defensa.

La única noticia que han recibido los allegados desde que los ocho jóvenes fueran arrestados y trasladados a Madrid ha venido de la mano del médico de confianza que ha podido asistirles. Y desde que el miércoles por la noche los viera por primera vez, -el jueves los visitó en dos ocasiones y ayer también se preveía que fuese así-, los padres y las madres de los arrestados han podido saber que sus hijos se encuentran «nerviosos, pero dentro de lo que cabe, bien».

Manifestaciones a diario

Mientras tanto, los vecinos de Hernani han respondido con contundencia la operación policial desarrollada contra la juventud de la localidad, y desde que se produjeran los arrestos alrededor de 800 vecinos se han manifestado día sí y día también en denuncia de este «montaje policial». La movilización convocada para ayer por el movimiento pro-amnistía no fue para menos, y casi dos millares de personas arroparon a las familias de los detenidos.

La solidaridad ha viajado esta noche hasta Madrid. Un autobús partió de madrugada desde Hernani rumbo a la Audiencia Nacional, donde esperarán la decisión del tribunal especial.

«Enaltecimiento»

Por otro lado, Oier Urrutia y David Hernández, detenidos el jueves por agentes de la Policía española en Gasteiz a raíz de los dos registros realizados en el bar Galtzagorri, también se prevé que comparezcan hoy en la Audiencia Nacional española.

Pese a que en un primer momento se detalló que los jóvenes gasteiztarras se encontraban en situación de incomunicación, GARA ha podido saber que ayer comparecieron en comisaria junto a su abogado. Éste explicó que los arrestados han sido acusados de un delito de «enaltecimiento al terrorismo» y al parecer, a tenor las preguntas del interrogatorio, la acusación se basa en unos carteles que la Policía habría encontrado en el interior del local.

El bar Galtzagorri, situado en el barrio Arana -del que Urrutia y Hernández serían dueño y trabajador respectivamente- fue registrado tanto el miércoles como el jueves por la Policía española. En la primera ocasión, los agentes no presentaron ninguna orden, y según los testigos se llevó a cabo de manera «muy violenta», amenazando y golpeando a los clientes, una joven fue detenida también por «desobediencia».

Hoy, a las 20.00, una marcha denunciará los arrestos en la capital alavesa.