Ryan Giggs (Cardiff 29-11-1973), supone toda una excepción en un mundo del fútbol sumergido en una sociedad de consumo en el que hasta los mejores futbolistas parecen productos de usar y tirar. Y es que, este extremo izquierdo de 35 años combina un cóctel de resistencia y fidelidad a la camiseta de los diablos rojos que le hacen competir por un puesto en el carril izquierdo de Old Trafford con jóvenes como Fabio que justo habían nacido cuando Sir Ryan Giggs -ostenta la Orden del Imperio Británico- debutó de la mano de Alex Fergusson en 1991.

El premio otorgado por sus compañeros de la Premier, «que al final han demostrado que saben de fútbol» como bromeó el propio Ryan Giggs al recibir el trofeo, viene a premiar no sólo su innegable calidad, sino su extenso palmarés y el amor a unos colores. El galés, único jugador de la historia de la Premier que ha marcado al menos un gol durante 19 temporadas consecutivas, ha renovado con el United hasta 2010, señal de que le sigue quedando cuerda para rato, con lo que completará dos décadas corriendo por la banda de Old Trafford. Sus 801 partidos son números de jugador franquicia, registros que sólo supera otro histórico, Paolo Maldini -898 partidos con la camiseta del Milán-.

Adiós compartido

El Manchester United tiene prevista una despedida digna de la magnitud del futbolista galés. Aunque el jugador no colgará las botas hasta el final de la próxima temporada, fecha en la que también está prevista la marcha del banquillo de Sir Alex Ferguson, el United tiene en mente retirar el dorsal número 11 cuando Giggs cuelgue las botas. Ese acto supondrá el punto final a un ciclo marcado por el éxito y el Manchester perderá a dos de sus símbolos, dos de las claves de su consolidación en la élite mundial.

En la previa del partido que podría ponerles a ambos en la final que pudiera darles su tercera Liga de Campeones, Alex Ferguson se deshizo en elogios hacia su jugador, al que calificó como «probablemente uno de los mejores jugadores de todos los tiempos».

«Tienes jugadores de los que dices: «sólo hay uno como él». Y éste es el caso de Ryan Giggs. Entró en el equipo en su 17 cumpleaños y ha estado subiendo y bajando la banda los últimos 20 años. Su resistencia, su aguante, es increíble. Pero no sólo eso. Ha creado momentos mágicos a lo largo de estos 20 años. Genera momentos en los que te dices: «¿cómo puede hacer esto con 35 años?»», declaró recientemente el manager galés preguntado por su pupilo, que sigue en la brecha y que la semana pasada marcó el tanto inicial en el 0-2 ante el Middlesbrough.

El futbolista galés, que sueña con conquistar su undécimo título de la Premier y el tercero de la Liga de Campeones, «está bendecido con unas grandes aptitudes físicas y atléticas, además de un gran deseo y necesidad para hacerlo siempre todo».

«Cuando ves a Ryan, compruebas que nunca ha cambiado. Lo que le hace un jugador tan grande es algo que no puede ser descrito, es como un motor o una dinamo que puede hacer algo todo el rato. Es un caso realmente raro. Tener 35 años y seguir compitiendo al más alto nivel de la competición europea es extraordinario», elogió.

Seguro que gran culpa de esa tenacidad la ha heredado del propio Alex Ferguson que, a sus 67 años, 23 de ellos al frente del Manchester, sigue con la misma ambición. «Es muy sencillo. Me gusta levantarme por la mañana, temprano, y ver a los jugadores en el entrenamiento y nunca me he cansado de ello».

«Siempre pienso en el fútbol como un juego de la expresión de uno mismo. No es sólo un ejercicio trivial, no es algo que se juegue los sábados y que ganemos por 1-0. Es mucho más que eso. Se trata de conseguir que los jugadores muestren lo mejor de sí mismos. Siempre he sido muy afortunado por tener jugadores a lo largo de mi carrera, incluso en el Aberdeeen, que son muy expresivos con su fútbol», explicó el galés.

Sin embargo, reconoce sentir «cierta envidia» al ver el palmarés europeo de otros grandes equipos y considera que no ha «ganado lo suficiente».