El secretario francés de Transportes, Dominique Bussereau, y la ministra de Interior y ex alcaldesa de Donibane Lohizune, Michèlle Alliot-Marie, han enviado una carta a los prefectos de los Pirineos Atlánticos y de Aquitania para informarles de que no desean nuevos proyectos en Lapurdi hasta que se saturen los ferrocarriles existentes. Según publicó ayer el periódico «Le Journal du Pays Basque», Bussereau y Alliot Marie han «ordenado» a los prefectos que abandonen los estudios sobre el Tren de Alta Velocidad entre Hendaia y Baiona.

El vicepresidente del Consejo de Aquitania y responsable de Trasportes, Jean Louis Carrere, declaró ayer que Bussereau y Alliot Marie no quieren estudiar nuevos transportes ferroviarios hasta que las infraestructuras actuales no se «saturen». Creen que ello no sucederá hasta dentro de diez años.

El alcalde de Hiriburu y consejero general de Paue, Alain Iriart, advirtió de que «los anuncios realizados en vísperas de las elecciones al Parlamento Europeo hay que tomarlas con precaución», pero expresó que es «una buena noticia que se aparque el proyecto». En opinión de Iriart, este hecho demuestra que «el movimiento popular y los electos tienen capacidad para lograr que se produzcan cambios en su ámbito».

En el mitin de UMP, que tuvo lugar ayer en el Casino de Biarritz, la ministra de Interior francesa confirmó la solicitud de abandonar los estudios del TAV en Lapurdi, aunque aclaró que ella está a favor del proyecto ferroviario y que la solicitud no supone la interrupción de la misma.

Michèlle Alliot-Marie indicó que el proyecto del Tren de Alta Velocidad puede pasar por la actual línea ferroviaria, pero con una condición: que se respete la naturaleza y que se mejore la línea en lo que respecta al impacto sobre el medio ambiente. Anunció que si se satura la actual infraestructura, construirán una línea subterránea y aclaró que las mercancías no pasarán por la costa, porque quieren respetar el medio ambiente.