GARA > Idatzia > Iritzia > De reojo

Raimundo Fitero

El tono

Si tomamos cualquier texto, sagrado, laico, administrativo, poético, de sección deportiva o económica, dependiendo de cómo lo leamos en voz alta, podrá alcanzar un valor u otro en quién lo escucha. «Te amo», sin ir más lejos, puede ser algo agradable, entusiástico o puede ser algo funcionarial, sin sentimientos añadidos. Es lo que conocemos por «el tono», lo que aporta matices a todo cuanto nos cuentan por la radio o la televisión y en esta última semana se ha detectado un tono muy eurocentrista al referirse a lo sucedido con el avión de Air France y todo cuanto han hecho los ejércitos brasileños en la búsqueda de los restos.

No se trata de una lectura subjetiva, sino de un análisis frío; cualquier cosa que sucede en África, Asia o América, es tratada con un recelo producto de una soberbia accidental y capitalista que asusta ya que puede alcanzar rasgos mucho más profundos que esta aparente falta de confianza y desembocar en graves errores de conocimiento. La Marina y el Ejército del Aire brasileños están buscando, junto a otras colaboraciones internacionales, los restos del avión siniestrado, pero siempre se utilizan entradillas algo despectivas sobre el asunto y cuando se filtró que se habían perdido algunas pistas, se destapó la caja de las suspicacias, el tonillo de los conductores de los espacios informativos empezó a ser demasiado evidente. Ahora esos mismos portavoces brasileños anuncian el encuentro de cuerpos sin vida, de piezas reales del avión, pero siguen en los medios de comunicación sin comprender que su solvencia es absoluta, que el avión caído es europeo cien por cien, de una compañía europea.

La famosa gripe porcina, cuando se destapó el asunto en México se creó un revuelo, se estigmatizó el sistema mexicano, se puso la mirada crítica a funcionar y se señaló con el dedo. Sucede en Europa, con mayor número de afectados y el silencio es sepulcral, o el estruendo es simplemente una jugarreta electoral, una guerra política. Cambiemos el tono sobre todo lo que venga de lugares que no conocemos nada más que desde su fachada turística o ideológicamente manipulada, a los que debemos, cuando menos, respeto sino admiración.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo