Todas las formaciones políticas se mostraron satisfechas en sus valoraciones sobre los resultados electorales. Un ejemplo de ello fueron las declaraciones realizadas por el vicecoordinador general de Aralar, Jon Abril, que aseguró que han «cumplido el objetivo» de obtener un europarlamentario dentro de la coalición Europa de los Pueblos. La formación que lidera Patxi Zabaleta concurrió con Eusko Alkartasuna en Hego Euskal Herria y el bajón de votos resultó muy significativo, pero se limitó a decir que deberán estudiar los resultados. Idénticas fueron las manifestaciones del candidato por Nafarroa, Aritz Romeo, que dijo que «ha habido una tendencia a la baja, que ha podido ser causa de diversos factores que habrá que analizar».

«Primera fuerza» en la CAV

El PNV ganó las elecciones en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y el presidente del EBB, Iñigo Urkullu, resaltó que consiguieron romper con el «bipartidismo» que hay en el Estado español y que siguen siendo «la primera fuerza» política. Según indicó, los jeltzales también cumplieron el «objetivo» al conseguir que Izaskun Bilbao sea «la voz de los vascos» en Europa.

Asimismo, envió un recado al PP en respuesta a las manifestaciones de Antonio Basagoiti en las que aseguraba que la formación conservadora había salido respaldada en las urnas. Urkullu advirtió al presidente del PP en la CAV que el acuerdo con el PSE les ha beneficiado en el Estado español, pero que «desde luego no ha sido refrendado» por la ciudadanía de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

En el PSE también aseguraron que estaban satisfechos con los resultados, aunque tuvieron que rectificar tras las primeras manifestaciones del candidato al Parlamento europeo, Ramón Jáuregui, en las que aseguraba que iban a obtener la victoria en la CAV. Al final tuvo que reconocer que fueron relegados por el PNV a una segunda plaza, pero declaró que estaban «prácticamente empatados» y que, por lo tanto, habían conseguido revalidar el apoyo obtenido en las elecciones autonómicas.

Desde EB, el coordinador general, Mikel Arana, se mostró contento de que IU-ICV mantenga los dos escaños que tenía, pero advirtió del avance de la derecha en Europa y destacó la necesidad de unidad que tiene la izquierda.