La izquierda abertzale de Hernani denunció ayer que la condena de la Audiencia Nacional contra su alcaldesa, Marian Beitialarrangoitia, «tiene un claro trasfondo político y estaba decidida de antemano».

La primera edil compareció en el tribunal especial de Madrid por haberse solidarizado con Igor Portu y Mattin Sarasola tras conocerse que habían denunciado torturas. Por ello, ha sido condenada a un año de prisión y siete de inhabilitación.

En opinión de la izquierda abertzale, no es la Audiencia Nacional, «que no tiene ninguna legitimidad ante los y las hernaniarras, sino los vecinos de esta localidad los que deben juzgar el trabajo realizado por Beitialarrangoitia». Consideran, además, que con esta sentencia se ha condenado también a la mayoría de este pueblo.

«Nos quieren amordazar, inmovilizar, asustar, paralizar, encarcelar...», insistieron. Sin embargo, advirtieron que seguirán trabajando y mostrando su sentimiento por encima de todo.

Quisieron agradecer el apoyo recibido por parte de los vecinos e invitaron a los representantes políticos del Ayuntamiento a aprender de la lección democrática que han ofrecido los hernaniarras: «Les pedimos que jueguen limpio y que no caigan en la tentación de utilizar esta sentencia para calmar su sed de poder y su impotencia».

La izquierda abertzale reiteró su apuesta por solucionar el conflicto político en clave democrática, mediante el diálogo y la negociación.