Ambiciosa producción fantástica europea asociada a Disney para su lanzamiento mundial y que tiene como realizador al austriaco Stefan Ruzowitzky, consagrado internacionalmente gracias al Óscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa obtenido con «Los falsificadores», pero que ya había alcanzado prestigio previamente con las dos entregas de «Anatomía». Quiere diferenciarse de las producciones de Hollywood para público infantil y adolescente mediante un tratamiento más naturalista de los personajes y las localizaciones, hasta el punto de que solamente hay una criatura digital generada por ordenador. Se trata del dragón verde que hace de mediador entre la anciana bruja, interpretada por Pilar Bardem, y la niña que ha de sustituirla para luchar contra el villano que pretende apoderarse del codiciado libro de los hechizos, del que depende el destino de la humanidad. La historia está inspirada en «Kika Superbruja y el libro de los hechizos», primero de los dieciocho libros que componen la saga literaria para niños escrita por el alemán Knister, seudónimo tras el cual se esconde Ludger Jochmann. Lo que la película aporta con respecto al best-seller original es un humor disparatado y muy gestual, que se concentra en los gags cómicos a cargo del malvado Hieronymus, caracterizado en la tradición visual del cine mudo por el actor Ingo Naujoks. De la acogida a esta primera parte depende la autonomía futura del proyecto, cuya aspiración es convertirse en una franquicia a la que le gustaría poder compararse con la rentable «Harry Potter».