EL TOUR 2009 COMENZÓ EN MÓNACO
El país más pequeño en el que todo se hace a lo grande
El país más pequeño del mundo, si se exceptúa al Vaticano, con menos de dos kilómetros cuadrados en los que caben sus 35.000 habitantes, despedirá hoy al Tour tras lograr que buena parte del montaje de uno de los acontecimientos que más mueve entrara en su minúsculo territorio durante cinco días. Un país diminuto que ha conseguido trasmitir su grandeza y su personalidad con una organización de la salida del Tour que ha superado a todas las anteriores.
J. I. | MÓNACO
Este mediodía dejará Mónaco una caravana del Tour que ha logrado entrar en su minúscula dimensión, aunque para diseñar el trazado de la crono se tuvieran que pedir diez de los quince kilómetros al Estado francés. No había otra opción. Cuando uno se da cuenta de que ha entrado en Mónaco ya ha salido. Se puede atravesar a nado sin necesidad de parar.
Parecía una dura prueba para tan pequeño territorio dar cabida a un espectáculo que mueve tanto. La superó a lo grande. En Mónaco no hay término medio. Todo es pequeño y grande al aprovechar el espacio de forma exagerada. A lo alto y en el subsuelo. Así, el país con más densidad es capaz de tener campo de golf, uno de los equipos grandes de la Liga francesa de fútbol, una carrera de Fórmula Uno, pruebas de caballos y natación del primer nivel y uno de los mejores torneos de tenis.
Para aumentar esa oferta con la salida del Tour se creó en setiembre un Comité Organizador, que ha tenido reuniones mensuales para dinamizar las seis comisiones que se crearon. Una para la seguridad, otra para cuestiones médicas, otra para los periodistas y página web, otra para el alojamiento, el desplazamiento en la villa y el protocolo, otra para las infraestructuras -entre las que destaca la tribuna colocada en el puerto con capacidad para 6.500 espectadores y el vallado del recorrido de la crono-, y otra para dinamizar a los voluntarios.
Hubo una convocatoria a través de internet y se apuntaron 550 de Mónaco, Niza o alrededores, de los que fueron seleccionados 410. Los voluntarios están en todos los sitios relacionados con el Tour con su pantalón o falda blanca y su camiseta roja. Con esos colores que le caracterizan se ha engalanado todo Mónaco. Cada ciudad que recibe al Tour se viste de amarillo, pero éstos demuestran su tono distinguido hasta en eso.
6,3 millones de presupuesto
Para brillar en la organización no han escatimado en gastos. El presupuesto de la salida del Tour asciende a 6,3 millones de euros aportados por el Gobierno de Mónaco. «No hemos querido buscar ingresos con entradas. Queríamos que ver el Tour, aunque sea en Tribuna, fuera gratuito. Hemos querido que fuera muy popular, que viniera mucha gente y ha sido un éxito. Así estuvieron 9.000 personas en la presentación del jueves y en la crono calculamos que entre 120.000 y 150.000», explica a GARA Didier Gamerdinger, director del Comité Organizador.
Nos atiende con la amabilidad que trasmiten sus 410 voluntarios, dispuestos a ayudar en todo a los periodistas. Han puesto a su disposición todo tipo de servicios. Hasta nos invitan a ir en barco desde el Forum Grimaldi, donde está el Centro de Prensa, hasta el Puerto que acogió la presentación y el inicio y el final ayer para no recorrer el kilómetro que los separa a pie por el paseo marítimo. En Mónaco se coge el helicóptero, como si fuera un taxi, para recorrer en siete minutos los 20 kilómetros que le separan del aeropuerto de Niza. Nos dan tickets para aparcar en el parking, un buen surtido de refrescos y ofrecen tickets para comer por quince euros. Eso en otro lugar sería desestimado, porque a los periodistas se les invita a comer en los finales de etapa. En Mónaco se agradece porque en los restaurantes del Principado se coloca como gran oferta comer un simple filete por 28 euros.
Todo un esfuerzo por agradar y para demostrar, como explica Didier Gamerdinger, que «Mónaco es un pequeño país, pero con mucha voluntad y que ama y vive con pasión el deporte».