La plantilla de Ingemar irá a la huelga indefinida si la empresa no negocia
La dirección de Ingemar, empresa de mármoles y granitos radicada en Usurbil, despidió el pasado 30 de junio a veinte trabajadores fijos con cerca de ocho años de antigüedad, y amenaza con más despidos. La plantilla ha convocado seis días de huelga, que convertirá en indefinida si la empresa no se sienta a negociar. Exigen la readmisión de los despedidos, y abordar, entre todos, el futuro de la empresa.Amaia ZURUTUZA |
La dirección de la empresa Ingemar despidió a veinte de sus trabajadores, con contratos fijos todos ellos y con alrededor de ocho años de antigüedad, el pasado 30 de julio. Ayer, los miembros del comité de empresa, junto a decenas de trabajadores, ofrecieron una rueda de prensa para explicar la situación que vive la plantilla e informar sobre el calendario de movilizaciones que han acordado para los próximos días.
No es la primera vez que una empresa aprovecha ciertas fechas para llevar a cabo distintas operaciones, como son los despidos o propuestas de expedientes. Esta empresa ubicada en Usurbil aprovechó las fechas vacacionales para informar, mediante un burofax a alguno, de que habían sido despedidos.
En nombre del comité, Karlos Telleria denunció que los 20 despidos se han realizado de una manera «totalmente arbitraria». Más aún, afirmó que les han amenazado con que estos 20 no van a ser los únicos despedidos porque «la dirección está estudiando hacer una reestructuración de plantilla».
Readmisión de los despedidos
Telleria criticó tajantemente el procedimiento de la dirección ya que el comité, -formado por seis delegados de ELA y tres de LAB- no ha tenido conocimiento de ninguna intención.
Los trabajadores reclaman la readmisión de los despedidos y exigen una negociación entre dirección y los representantes de los trabajadores. «Sabemos que el volumen de trabajo ha descendido pero así no se pueden hacer las cosas», señaló Telleria. En este sentido piden a la empresa que entre todos aborden el futuro de la fábrica y la forma en que eso va a incidir en los trabajadores de la misma. Apuntaron a posibilidades como las prejubilaciones.
Desde el comité quisieron remarcar otro aspecto en la actuación de la dirección por representar «un fraude y un ataque sin precedentes contra los derechos de los trabajadores». Y es que los despidos realizados representan al 9,5% de la totalidad de la plantilla. Para que una empresa pueda despedir al 10% de su plantilla tiene que presentar un ERE, lo que conllevaría un proceso de negociación y la intervención de la Delegación de Trabajo. «Se han ahorrado un ERE», señalaron.
Tras un mes y medio esperando alguna reacción por parte de la dirección, el pasado 5 de setiembre los trabajadores en asamblea acordaron un calendario de movilizaciones, con 110 votos a favor y 6 abstenciones de un censo de 139 personas. Así, ayer realizaron el primer día de huelga de los seis convocados, que seguirán los días 15, 17, 22, 23 y 24 de setiembre.
Y si para el día 25 la dirección no se muestra dispuesta a negociar, emprenderán una huelga indefinida.
Hasta julio de este año 70.682 trabajadores de Hego Euskal Herria estaban afectados por algún Expediente de Regulación de Empleo, de las cuales 3.420 sufrieron un ERE de extinción, por lo que fueron despedidos.
Si una empresa quiere despedir al 10% de su plantilla debe presentar un ERE. Desde el comité de Ingemar denunciaron que la dirección ha despedido al 9,5% para «ahorrarse un ERE».
CCOO denunció ayer que la empresa alavesa Faesnor acaba de anunciar el despido de ocho trabajadores, cuatro de los cuales no dieron su aprobación al ERE que la compañía presentó en primavera, y que finalmente denegó, en los términos en los que estaba planteado, el Departamento de Empleo de Lakua. CCOO consideró inadmisible «que la dirección penalice con la pérdida de su empleo a los trabajadores que ejercieron sus derechos oponiendose a un planteamiento irracional». Señalaron que alguno de los despedidos tiene 64 años y que la dirección se niega «siquiera a ofrecerles la prejubilación». Por su parte, ELA informó de que la dirección de Formica en Galdakao quiere despedir a 50 trabajadores, medida que rechazó tajantemente ya que la planta es «altamente competitiva y la producción se halla en niveles altos».
También se mostró «radicalmente en contra» el sindicato ELA ante el ERE de extinción para 90 personas en la empresa Comansa. El sindicato afirmó no estar de acuerdo con los motivos que alega la empresa, y se preguntó si la operación corresponde a un caso de deslocalización, teniendo en cuenta la creación en los últimos años de empresas filiales del grupo, tanto en China como en EEUU. ELA tiene previsto reunirse con la dirección el próximo lunes. Y en Miñano, Araba, la empresa Tuboplast presentó ayer al comité un ERE de 46 días para 295 operarios, también rechazada por ELA.
Mientras tanto las empleadas de la residencia de ancianos San José de Ordizia, que mantienen un conflicto laboral desde hace seis meses, intensificarán sus movilizaciones para reivindicar la equiparación salarial con el personal municipal. GARA