Pese a que no ganaron los grandes favoritos, no hubo sorpresas y el australiano Jack Bobridge y la estadounidense Kristin Armstrong se colgaron el oro en las cronos sub 23 y femenina del Campeonato del mundo en Mendrisio. Eneritz Iturriaga fue vigésimo quinta, por debajo de sus expectativas.

El italiano Malori y el alemán Gretsch, campeón y subcampeón de 2008 respectivamente, eran los grandes favoritos. Desde el primer paso intermedio fueron superados por Bobridge. El joven australiano marcó siempre los mejores tiempos en un circuito de 33,2 kilómetros con dos repechos exigentes.

El canguro, de sólo 20 años, se alzó con el oro por delante del portugués Oliviera, lo que una vez más demuestra lo bien que trabaja el país luso con las categorías inferiores. Gretsch, campeón de Europa, se pudo agarrar al podio, con su compañero de selección Kittel cuarto. Malori, que el próximo año correrá en el Lampre, fue el gran derrotado, al acabar quinto.

Imbatible

La crono femenina, de 26,8 kilómetros, fue un monólogo de Armstrong. La estadounidense, actual campeona olímpica, dominó desde el inicio y repitió el triunfo de 2006. Sus rivales se tuvieron que conformar con el podio. Arndt y Neben se quedaron fuera; la italiana Cantele fue segunda y la danesa Villumsen tercera, ambas a casi un minuto.

Iturriaga salió de las primeras y se mantuvo entre las diez mejores hasta mitad de carrera para acabar en el puesto 25. «Ha sido una crono buena, aunque se me ha hecho mucho más dura de lo que realmente esperaba. El top-20 era un objetivo realista, para nada descabellado, y pienso que me ha faltado un puntito para haber cumplido con lo que planeaba. No estoy del todo contenta», explicó.