Joseba Egibar, presidente del PNV en Gipuzkoa y portavoz jeltzale en el Parlamento de Gasteiz, observa una clara intencionalidad en la decisión de la Au- diencia Nacional de abrir juicio ahora contra Arnaldo Otegi, Joseba Álvarez y Joseba Permach por el acto de Anoeta de noviembre de 2004, según denunció ayer.

Egibar declaró en Radio Euskadi que «tengo una clarísima lectura: creo que ante la posible inminencia de un proceso político, que espero que también sea de paz, nuevamente se pretende actuar contra la parte política que puede posibilitar precisamente ese avance».

A su juicio, existe una «consideración de fondo» que ha dado pie a la apertura de este juicio, y acusa directamente a «quien no quiere o no quieren que un proceso de esa naturaleza se pueda dar».

Para justificar su tesis, llamó la atención sobre el hecho de que «después de cinco años, algo que podía tocar se ha vuelto a activar». El procedimiento se abrió realmente en noviembre de 2004, nada más producirse el acto del Velódromo de Anoeta en el que se presentó un mecanismo para la resolución del conflicto que fue aceptado unánimente por todos los agentes y que dio pie al proceso de negociación entre 2005 y 2007. Pero las actuaciones estuvieron paradas hasta 2008, en que el juez Eloy Velasco emprendió nuevos trámites. Y es ahora cuando ha decidido llevarlo a juicio.

En la vista oral no sólo ejercerá la acusación el Foro Ermua, sino que la Fiscalía también ha planteado peticiones de cárcel de dieciocho meses contra los tres representantes independentistas, a quienes se tratará de imputar un delito de «enaltecimiento del terrorismo».