El comité de Tubos Reunidos exigió ayer la retirada inmediata del segundo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por la dirección, con el que se pretende «eliminar los derechos de los trabajadores». Denunció que Tubos Reunidos, que durante los últimos años ha anunciado «enormes cifras de beneficios», trata de «hacer un negocio» de la actual coyuntura económica.

El pasado 8 de octubre, la dirección presentó un segundo ERE, con el que pretende suspender hasta un 75% de la jornada durante 13 meses y un complemento del 70% del salario. A su entender, su verdadera pretensión no es sino «socavar el convenio de empresa y eliminar los derechos de los trabajadores». Así, censuró que además pretenda que el comité «avale con su firma su ansiada polivalencia, `flexibilidad' de calendarios, para cambiar a su antojo los sistemas de trabajo, congelación del convenio y amortización y desaparición de puestos de trabajo».

Criticó que Tubos Reunidos «se ha unido a esa larga lista de empresas que están pretendiendo haciendo negocio de la actual coyuntura para que sus balances económicos sigan siendo satisfactorios».

El comité recordó que la empresa batió en 2007 su récord de ganancias con 84 millones de euros netos y en 2008 logró otros 81,8 millones. Ya en el primer trimestre del año ha ganado 8,3 millones y se ha ahorrado otros 3 con el primer ERE.