La visita de un equipo como el Real Madrid siempre es un partido especial y el BEC se llenará esta tarde con la ilusión de que la mala racha termine ante un Real Madrid que llega invicto en ACB. Aunque lleve poco tiempo, la revolución introducida por Ettore Messina gracias al gran desembolso económico realizado parece dar frutos pese a sus bajas interiores y los blancos son uno de los equipos más poderosos del continente. Precisamente la llegada del técnico italiano a Madrid fue uno de los detonantes de que el Bizkaia Bilbao Basket pudiera afrontar este verano uno de los fichajes más importantes de su historia.

A pesar de que los recambios como Siskaukas, Herrmann, o Parker se convirtieron en imposibles y la falta de treses en el mercado, el técnico de Catania decidió prescindir de un Alex Mumbrú cuya posición no ha sido cubierta en el Real Madrid y que tratará de demostrar al técnico de que podía haber tenido un sitio en una plantilla que sólo adolece de la falta de un alero alto.

Aceptando la oferta que le llegó de Bilbo, además de un gran contrato, el alero catalán se aseguró un papel estelar en una plantilla diseñada en principio para dar un salto de calidad.

Tras un comienzo esperanzador, tanto el juego del equipo como el del propio Mumbrú han decrecido y una de las explicaciones puede ser la fascitis plantar de un jugador que, no obstante, trata de responder desde la cancha a la confianza depositada en él. En este sentido, Txus Vidorreta alabó ayer la integración que ha tenido el internacional español, desvelando que juega «mordiéndose el labio inferior para aguantar el dolor y ayudar al equipo».

1.199 rebotes

Con su físico, el jugador que llegó a jugar 177 partidos en la ACB con la camiseta blanca en las dos etapas en las que fue jugador madridista -entre ambas defendió los colores de la Penya- deberá colaborar en una faceta importante como la del rebote, en la que el equipo visitante puede acusar la baja del todavía lesionado Felipe Reyes, y en la que puede alcanzar la importante cifra de 1.200 rechaces recogidos con sólo conseguir uno esta tarde en el BEC.

A tres días de afrontar un reto importantísimo como el de conseguir entrar en la fase de grupos de la Eurocup, el técnico Txus Vidorreta no escondió su «preocupación» por el mal comienzo de temporada, con cuatro derrotas consecutivas, pero se mostró ilusionado ante el partido de hoy.

«Ha llegado la hora de demostrar en la cancha que somos mejores y de momento no lo estamos demostrando», lamentó el de Indautxu, que podrá contar hoy con toda su plantilla, incluido Chris Warren.