El Gobierno francés lanzó ayer un amplio y controvertido debate sobre «identidad nacional» para reflexionar sobre lo que significa «ser francés» en la actualidad y, según sus palabras, cómo integrar mejor a la inmigración.

Es una iniciativa con la que Ejecutivo pretende que emerjan «acciones que permitan afirmar nuestra identidad nacional y reafirmar los valores republicanos y el orgullo de ser francés», señala la nota difundida por el Ministerio de Inmigración.

El titular del Departamento, Eric Besson, es el promotor de este debate que se desarrollará en prefecturas (delegaciones del Gobierno) y subprefecturas hasta el próximo 31 de enero. En todas ellas, se organizarán reuniones abiertas «al conjunto de nuestros conciudadanos», que también podrán participar mediante internet.

El debate se desarrollará en dos partes fundamentales en las que se presentarán cuestiones y propuestas concretas: una primera centrada estrictamente en lo que es la «identidad nacional» y la segunda, en la «aportación de la inmigración a la identidad nacional».

Según las encuestas, la mayoría de los ciudadanos aprueba la iniciativa, mientras que parte de a clase política la considera electoralista.