El PP suspendió ayer cautelarmente de militancia al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, aunque no están zanjadas las consecuencias del enfrentamiento interno en la Comunidad de Madrid, ya que muchos dirigentes mantienen a Esperanza Aguirre en el centro de sus críticas. La secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, calificó de «error tremendo» la inasistencia de Aguirre al Comité Nacional.

El presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, afirmó que resulta «inmoral» hablar de quién es el presidente de una caja de ahorros «con el paro que hay en España».

Mientras el Comité de Derechos y Garantías cursa su expediente y decide qué sanción imponerle por sus declaraciones contra Aguirre, Cobo no podrá representar al PP pero todo apunta a que conservará su cargo en el Consistorio madrileño en calidad de concejal independiente, porque la resolución del órgano disciplinario del partido no conlleva la inhabilitación institucional.