El Plan 2000E para la compra de coche anima las ventas y las quejas porque no hay dinero para todos
Nerea GOTI
Los gobiernos de Madrid, Lakua y Nafarroa siguen vendiendo prórrogas del programa de ayudas a la compra de vehículos hasta fin de año y los concesionarios, aunque contentos por lo que supone de incentivo a las ventas, lo que más temen es la gestión de esas ayudas, que en la mayoría de los casos describen como «bastante caótica».
Tal y como ocurriera con la promoción de ayudas a la compra de muebles, las ayudas se venden a bombo y platillo, pero a la hora de formalizar las operaciones aparecen las pegas. En este caso, la incertidumbre es aún mayor, porque a día de hoy el plan sigue en vigor, pero según en qué concesionario.
El Plan 200E, o su apéndice en la CAV, Plan Euskadi 2000E, consiste en una ayuda a la compra de un vehículo, que facilita el Estado español junto a los ejecutivos autonómicos y los fabricantes. En Hego Euskal Herria, la cuantía varía. En Araba, Bizkaia y Gipuzkoa el plan promete a los compradores una rebaja de 2.000 euros en el precio del vehículo, 500 euros provinientes del Estado, otros 500 por parte del Ejecutivo de Lakua y 1.000 a cargo del fabricante. En cambio, en Nafarroa, se conceden 200 euros más.
Para acceder a las ayudas, la compra de un coche nuevo -las condiciones varían para los de segunda mano- tiene dos requisitos básicos: un coste máximo queno supere los 30.000 euros y la entrega del vehículo viejo para su achatarramiento, con un mínimo de 10 años de antigüedad o un kilometraje mínimo de 250.000 kilómetros.
Ahora bien, algunos compradores, aun cumpliendo las condiciones mencionadas, se han encontrado con un panorama bien distinto. El ejemplo de D.L. valdría para ilustrar la situación en la que se han encontrado muchas personas, tantas que en la red ya hay un foro que reúne este tipo de denuncias.
Este guipuzcoano relató a GARA que a primeros de setiembre encargó un vehículo, cuando ya había rumores de que el plan estaba agotado y el concesionario ya le había advertido que mantendría la ayuda de 1.000 euros por la parte que le corresponde pero que no estaban garantizadas las ayudas de Lakua y Madrid. La cuestión es que a principios de octubre volvió a anunciarse una prórroga de las ayudas, a la que también se adhería el Gobierno de Lakua. Hace sólo una semana volvió al concesionario a preguntar cuándo llegaria el vehículo y «hete ahí mi sorpresa cuando el del concesionario me responde con un `no' cuando le comento que el plan de ayudas está en vigor».
La explicación del distribuidor, según expone, es que buena parte de la partida de 40 millones con la que se ha relanzado el plan estaban comprometidos con matriculaciones anteriores y sólo alrededor de 15.000 millones se iban a repartir a nuevas compras, con los que se «ha hecho una especie prorrateo entre concesionarios».
Tras una ronda de consultas con concesionarios de Bizkaia, los responsables de ventas significaron que las subvenciones han animado un mercado muy deprimido por efecto de la crisis, pero buena parte de ellos mostraba abiertamente sus críticas a la gestión de las ayudas y particularmente a la «incertidumbre» que genera.
Preguntados por la existencia de casos de compradores que, estando vigentes las ayudas y cumpliendo los requisitos no tienen garantizadas las mismas, se han encontrado con que no tienen seguro el acceso a los 1.000 euros que subvencionan, coinciden en reseñar que «todo ha sido un poco caótico» y mientras algunos señalan que ya no hay ayudas a la compra, porque el dinero «ya está agotado», otros afirman que «todavía nos quedan unos pocos» y explican que esto «depende del volumen de ventas».
«Ha sido una verguenza. El Gobierno ha mentido porque ha prometido un dinero que no tenía, pero tampoco es nada nuevo porque muchos concesionarios teníamos la experiencia del Plan Vive», consideró una comercial de un concesionario de los alrededores de la capital vizcaina, que calificó de «engañosa» la publicidad difundida en torno al Plan 2000E.
Si para aclarar dudas alguien recurre a la página web de la Sociedad para la Promoción y Reconversión Industrial (SPRI), encargada de la gestión de las ayudas, no va a sacar demasiado en limpio, porque en ese enlace aún figura una información del pasado día 3 de noviembre sobre la decisión de Lakua de prorrogar hasta fin de año del Plan Euskadi 2000E. La misma fuente recuerda que el plan se puso en marcha el pasado 18 de mayo con una dotación presupuestaria de 5 millones de euros. «Tras el éxito alcanzado con esta medida, la partida reservada se agotó el 8 de octubre», señala la sociedad, al tiempo que cifra en 10.000 los vehículos vendidos gracias al mismo programa.
La SPRI avanza asimismo que en lo que corresponde al Gobierno de Lakua se va a habilitar una partida de dos millones de euros más, «de modo que las solicitudes que hayan llegado posteriormente al 8 de octubre sean atendidas». Sin embargo, la situación a pie de concesionario es otra.
«No hay información clara, hay mucha confusión», señalaron a GARA en un distribuidor que reconoció que en cuanto llegaron los rumores de que el dinero se agotaba, «la gente se retrajo bastante».
GARA se puso en contacto con la propia SPRI para consultar si tenían constancia de quejas entre compradores que se han visto sin ayudas mientras se anunciaban prórrogas del plan, aunque su respuesta fue que no podían ayudarnos.
Alguna constancia deben tener, porque la asociación de consumidores EKA-OCUV reconoció a este diario que han llegado quejas con relación a la compra de vehículos sujetas al plan que se han derivado precisamente a la SPRI, mientras insisten en que el comprador clarifique las condiciones de compra.
se vendieron en la CAV entre mayo y octubre, un 1,6% más que en el mismo periodo del año pasado. Sólo en octubre la matriculación había crecido un 50,4%.