Buena racha
Entre la cautela y el optimismo
Los rojiblancos confirman su mejor arranque liguero de los últimos años, pero siguen hablando de la permanencia como principal objetivo. La última vez que alcanzaron los 17 puntos en la 11ª jornada, acabaron la campaña en puestos europeos.
Amaia U. LASAGABASTER
Lo que puede dar de sí un solo punto. El que sumó el Athletic frente al Barcelona sigue mereciendo elogios y aplausos varios, aunque lo más importante, probablemente, es que parece haber hecho olvidar el reciente fiasco copero.
Lo cierto es que resulta complicado encontrarle peros al empate del sábado. Amén de cortar la mala racha que acumulaban los bilbainos frente al conjunto culé, recuperó la mejor versión del Athletic y, sobre todo, dio continuidad a sus últimos resultados ligueros, colocando a la escuadra rojiblanca en su mejor situación de las últimas temporadas. Los 17 puntos que luce ahora mismo en el casillero suponen toda una novedad para un Athletic que no alcanzaba semejante guarismo en la 11ª jornada desde la temporada 03/04. Precisamente la última en la que el equipo accedió a competición europea vía Liga.
Así que no es de extrañar que en el entorno rojiblanco se empiece a hablar ya de un segundo año consecutivo recorriendo el continente como objetivo factible. A los propios jugadores les cuesta sustraerse de la ilusión que ha generado su buen momento en el torneo de la regularidad y el discurso prácticamente inamovible -y comprensible, viendo el rendimiento de los últimos años- de principio detemporada, en el que se fijaba la permanencia como principal objetivo, empieza a contar con voces disidentes. Aunque de momento, los bilbainos se mueven entre la cautela y el optimismo.
Las referencias a la permanencia se mantienen, pero la palabra Europa empieza también a dejarse notar, y no sólo para hablar de la próxima visita al Austria de Viena. Hubo alguna mención el sábado en el postpartido y también apareció ayer, en el regreso al trabajo. Aunque todavía con timidez. Menos en el de Carlos Gurpegi, que deja claro que el equipo mira arriba. «Después del partido -desveló- comentábamos que el año pasado contra el Atlético de Madrid, el Villarreal y el Barcelona no habíamos sumado ningún punto y este año llevamos los siete. Es algo importante, creo que en Liga las cosas nos están saliendo mejor este año y hay que seguir en esta línea. Pero ahora somos octavos y no queremos mirar hacia abajo para nada». Y más en el caso de Koikili, que reconoce que el equipo se encuentra «en una situación cómoda» y ahora mismo «se mira al séptimo-ocatvo puesto», pero insiste en que «el primer objetivo es la permanencia porque creo que todavía es muy pronto para hablar de otros».
Las tendencias
Lo cierto es que, aunque once jornadas suenen a poco, las tendencias suelen estar bastante definidas a estas alturas. Son pocos los equipos que, transcurrido casi un tercio de la competición, consiguen voltear, para bien o para mal, su situación. Sobre todo entre los que pelean por los primeros puestos.
El Athletic tiene el primer ejemplo en casa. En la temporada 03/04, a estas alturas, Ernesto Valverde tenía al equipo como lo tiene ahora Joaquín Caparrós, octavo con 17 puntos. A final de temporada era quinto, lo que le daba uno de los dos billetes para la Copa de la UEFA. Desde entonces, se ha mantenido el paralelismo, aunque con peores números: iba mal en la 11ª jornada y, afortunadamente, algo mejor -lo justo para salvarse, o poco más- en junio.
Y lo mismo sucede con los equipos que, en estos seis años, han ocupado las plazas con premio europeo. Prácticamente todos los que a estas alturas han estado peleando por los seis primeros puestos, se han mantenido en la batalla hasta el final. Sobran los dedos de una mano para enumerar las grandes remontadas o los grandes batacazos en las últimas campañas.
De aquí a fin de año, el Athletic puede tener una buena oportunidad para mantener esa tendencia al alza. A excepción del Valencia, que visitará San Mamés en un par de semanas, y que con cuatro victorias consecutivas se ha asentado en la zona noble, los rojiblancos se enfrentarán a rivales -Almería, Zaragoza y Osasuna- que, de momento, no han demostrado ser mejores.
El regreso del equipo al trabajo se saldó con caras alegres y buenas noticias. Personificadas en la figura de Iker Muniain que, una semana después de volver del Mundial sub17, pudo entrenar por fin con el grupo.
Aunque la lesión con la que volvió de su periplo con la selección española no era grave -un ligero edema muscular en el músculo pectíneo de su muslo izquierdo-, el jugador navarro ni siquiera pudo trabajar con sus compañeros la semana pasada. Esta vez sí lo hizo, con absoluta normalidad, y, salvo sorpresa, Joaquín Caparrós podrá llevárselo a Almería, después de que Muniain se haya perdido los nueve últimos compromisos de su equipo.
También podrán viajar los jugadores que llegaron justos al choque frente al Barcelona o concluyeron el encuentro con algunos problemas físicos, como Carlos Gurpegi, Fran Yeste, Gaizka Toquero o Fernando Llorente. Ayer tuvieron sesión de recuperación y hoy, como el resto de la plantilla, disfrutarán de jornada de descanso para empezar a preparar el miércoles la visita al Almería.A.U.L.
Tras las tres victorias iniciales, el Athletic entró en barrena y necesitó casi mes y medio para reencontrarse con el triunfo. Pero ha vuelto a recuperar el ritmo, saldando las tres últimas jornadas con dos victorias, un empate y un solo gol encajado.
Aunque once jornadas suenen a poco, las tendencias suelen estar bastante definidas a estas alturas. La gran mayoría de los equipos que, transcurrido casi un tercio de competición, pelean por Europa, lo siguen haciendo hasta final de temporada.