Coincidiendo con el último miércoles de mes, Presoen Aleko Taldeak (PAT) ha llamado a participar en las distintas movilizaciones que se llevarán a cabo mañana en los campus universitarios de Euskal Herria. Según manifestaron desde la organización, «es necesaria la implicación y el trabajo de la gen- te» para acabar con la situación que viven los presos políticos vascos y sus familiares y amigos.

Según afirmó en una nota de prensa, con la aplicación de la «cruel» política penitenciaria, la conculcación de derechos de los presos políticos vascos «es el pan de cada día». Así, recordó que los estados español y francés «están tomando medidas con intención de destruir la integridad física de los presos». Para ello, según hizo hin- capié, ambos estados hacen uso de medidas «como la cadena perpetua, la pena de muerte aplicada a presos enfermos o la dispersión que aleja a los presos de sus familiares y amigos» a cientos de kilómetros.

Asimismo, PAT declaró que «no se cumplen muchos de los derechos que tienen los presos, como es el caso del derecho a estudiar». Hasta ahora, los recluidos en las cárceles del Estado español tenían prohibido estudiar en la UPV, por lo tanto no podían cursar en euskara.

Ahora, según afirma el movimiento favorable al derecho a estudiar de los presos, aquellos que se encuentran en las cárceles del Estado francés tampoco podrán hacerlo. Ante esta situación, manifestaron que «es necesario» terminar con todas estas situaciones «graves» que afectan tanto a los prisioneros como a sus allegados.

Por su parte, según informaron a GARA, ayer por la mañana familiares del preso ondarruarra Mikel Etxaburu se quedaron sin visita por negarse a ser cacheados. Ante lo ocurrido, los presos políticos de la cárcel madrileña de Alcala-Meco solicitaron una reunión con la dirección de esta prisión y ésta les respondió que los cacheos y registros son consecuencia de una orden recibida hace un mes.

Como consecuencia, los presos anunciaron al subdierctor del centro que hoy llevarán a cabo una protesta: se encerrarán en sus celdas y no comerán durante todo la jornada.

Chapeo en Puerto III

Por otra parte, los presos vascos del centro penitenciario de Puerto III, en Cádiz, llevaron a cabo ayer un chapeo a modo de protesta. Su objetivo era denunciar todo lo ocurrido durante el fin de semana en este centro, donde Xabier Alegria y Xabier Rey se quedaron sin visitas porque sus familiares se negaron a ser cacheados.

Etxerat recordó que en las últimas tres semanas se han «perdido» alrededor de 120 visitas por este mismo motivo. Entre ellos, familiares de presos que se trasladaron hasta la prisión madrileña de Aranjuez y se encontraron con un cartel que decía: «Debido a que se introducen objetos que no puden ser detectados por el arco, todos los familiares podrán ser sometidos a cacheos palpables y desnudos integrales».

Para protestar ante esta situación, ayer se movilizaron 68 personas en Ondarroa, 15 en Bermeo, 24 en Ataun, 18 en Ordizia, 32 en Iurreta, 11 en Euba, 80 en Santurtzi, 16 en Otxarkoaga, 49 en Laudio, 31 en Zaldibia, 21 en Zorrotza, 26 en Altza y 14 en Añorga.