Tras la aparición de un gran socavón en la calle Olano, en el barrio bilbaino de Miribilla, el grupo municipal de la izquierda abertzale exigió ayer al Ayuntamiento que pida al Ejecutivo de Lakua la elaboración de un informe «riguroso» sobre la estabilidad del terreno, un entorno atravesado por las galerías de antiguas explotaciones mineras. Los independentistas, además, reclaman el cese provisional de los trabajos hasta que se aclare el desplome.

El socavón, apuntan desde la formación abertzale, está junto a unos bloques de pisos que promueve Viviendas Municipales, sociedad dependiente del Consistorio bilbaino. Se trata de cuatro bloques con 173 pisos sociales, a los que acompañaría el futuro ambulatorio del barrio.

Al ser aprobado el proyecto, en el otoño de 2008, la izquierda abertzale presentó una alegación en la que instaba a los responsables municipales a, antes de otorgar la licencia de construcción, demandar a Lakua la elaboración de sendos estudios acerca de las sustancias contaminantes que almacenaban los suelos y la propia estabilidad del terreno. La petición la efectuaron después de que se descubrieran elementos contaminantes en otros solares y de que se paralizase la construcción de un instituto de FP en otra manzana.

La demanda de la formación independentista fue rechazada, tal y como recuerdan, «sin debate alguno, a pesar de las advertencias que hicimos».