Los dos j�venes de Lizarra puestos el jueves en busca y captura por no acudir al juzgado para que se les realizaran unas pruebas de ADN se presentaron ayer voluntariamente en el tribunal, acompa�ados por su abogada. Una vez en dependencias judiciales, se negaron a realizar las pruebas y la juez no se atrevi� a dar la orden a los polic�as para que forzaran a los j�venes a hacer la prueba. No obstante, la magistrada cit� a ambos j�venes para un juicio r�pido por un delito de desobediencia para el pr�ximo martes en Iru�ea.

El movimiento pro amnist�a de Lizarraldea realiza una lectura en positivo de los acontecimientos. A su juicio, el hecho de que la magistrada no autorizara a la Guardia Civil constituye una victoria, puesto que evit� que la jueza Esther Fern�ndez sentara una peligrosa jurisprudencia en la aplicaci�n de la intervenci�n corporal.

La jueza hab�a ordenado la extracci�n de ADN a cuatro j�venes de Lizarra a ra�z de su participaci�n durante las fiestas de la localidad del pasado a�o en una kalejira no autorizada, supuestamente, para cotejarla con otras pruebas que la Guardia Civil asegura tener en su poder. Los cuatro est�n acusados de �atentado contra la autoridad�, ya que durante la carga contra la kalejira resultaron heridos ocho militares.

Los cuatro se negaron desde el principio a prestarse a la prueba y emprendieron una batalla legal en los tribunales con varios recursos. Asimismo, iniciaron una campa�a de denuncia de la persecuci�n y el acoso a la que est�n siendo sometidos.

Los recursos remarcan que la prueba de ADN es �completamente prescindible� y denuncian que la Polic�a ni siquiera ha aislado muestras gen�tica de las pruebas y, dado que han pasado varios meses desde los hechos enjuiciados, extraer ADN en buenas condiciones es inviable.

Concentraci�n de apoyo

Sin embargo, la jueza se mantuvo firme y el caso deriv� hasta la Audiencia Provincial, que volvi� a desestimar el recurso. Con el apoyo de la segunda sentencia, la jueza de Lizarra cit� a los j�venes el jueves en el tribunal para que la Polic�a les tomara muestras de saliva. S�lo acudieron dos, y la magistrada puso al resto en busca y captura. Asimismo, orden� que, si eran detenidos, se les tomase el ADN por la fuerza.

Los j�venes buscados acudieron al juzgado de Lizarra por propia voluntad y en compa��a de su abogada. Al igual que otro de sus compa�eros, se ampararon en que hay un recurso que todav�a no se ha resuelto para no someterse a la extracci�n de saliva. Por otra parte, 60 personas se manifestaron ayer por la tarde en apoyo a estos j�venes.