Rusia y EEUU ultiman la firma de un nuevo tratado de desarme en Praga
Fuentes del Kremlin y de la Casa Blanca coincidieron, con mayor o menos rotundidad, en que ultiman los detalles del nuevo tratado de desarme nuclear, START II, y coincidieron en adelantar que el escenario de la firma será la capital checa, posiblemente a principios de abril. No concretaron cómo se ha salvado, en su caso, el escollo del escudo antimisiles estadounidense en Europa central, caballo de batalla para su ratificación en los parlamentos respectivos.
GARA
Rusia y Estados Unidos han llegado a un acuerdo sobre todos los puntos del nuevo tratado de desarme nuclear, que sustituirá al START I, anunció el Kremlin.
«Todos los documentos del nuevo tratado han sido consensuados», señaló desde el anonimato una fuente de la presidencia rusa, que no dio más preci- siones, aunque añadió que ahora se deben plasmar por escrito esos acuerdos, lo que podría demorarse algunos días.
La misma fuente añadió que «Praga se perfila como el lugar más probable de la firma del nuevo tratado». El Gobierno checo había anunciado horas antes que su capital acogería la firma del nuevo START, después de que la opción de la capital ucraniana, Kiev, fuera rechazada por el Gobierno de Washington.
Un alto responsable estadounidense señaló que ambas partes estarían «en condiciones de dar los últimos retoques a un nuevo tratado START».
Esta fuente, que se refugió asimismo en el anonimato, confirmó que «hemos conversado con nuestros aliados checos y con los rusos sobre la posible firma en Praga una vez que el tratado esté definitivamente listo».
Recordó que Praga fue escenario en la primavera del año pasado del famoso discurso del presidente de EEUU, Barack Obama, a favor del desarme nuclear mundial.
Según el diario «Kommersant», la firma tendrá lugar antes de la conferencia nuclear que se celebrará el próximo 12 de abril en Washington. El presidente ruso, Dmitri Medvedev, tiene previsto visitar Eslovaquia el 7 de abril para la conmemoración de la liberación de su capital, Bratislava, en la Segunda Guerra Mundial.
Complejas ratificaciones
Los analistas señalan que el problema podría radicar no en la firma del tratado, sino en su ratificación por parte de los legislativos de ambos países. Y es que la Duma rusa no dará su visto bueno si el documento no vincula armamento ofensivo y defensivo, y el Senado estadounidense tampoco lo ratificará si el texto limita la capacidad de EEUU de desplegar escudos antimisiles en suelo europeo, advirtió recientemente el senador republicano y en su día rival de Obama, John McCain.
Rusia y EEUU iniciaron el 9 de marzo en Ginebra la última ronda de negociaciones sobre desarme que abrieron hace casi un año en Londres por los presidentes ruso, Medvedev, y estadounidense, Barack Obama.
La pasada semana los ministros de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, y estadounidense, Hillary Clinton, expresaron en Moscú su confianza en la pronta firma del nuevo tratado que sustituya al de Reducción de Armas Estratégicas (START), firmado en 1991 y que expiró en diciembre. Ambos acordaron que el nuevo tratado de desarme, piedra angular de la restauración de las relaciones bilaterales socavadas en la era Bush, debe reducir el número de cabezas nucleares de cada país a una cifra de entre 1.500 y 1.675 en sus primeros siete años de vigencia.
El tratado de defensa de la Unión Europea Occidental (UEO), creada en 1948 y que agrupa a 28 países, será denunciado en fechas próximas, anunció ayer el presidente de la asamblea interparlamentaria de la UEO, Robert Walter.
«La UEO, en tanto que organización, será desmantelada de aquí a, como mucho, un año» señaló Walter, diputado conservador británico que preside la asamblea de esta institución parlamentaria, con sede en París. La sede oficial de la UEO, creada en plena Guerra Fría, está en Bruselas.
La Unión Europea Occidental o UEO -no confundir con la Unión Europea- es una organización de defensa y seguridad del ámbito europeo formada por los estados miembro de la Unión Europea y los socios europeos de la OTAN.
Esta organización internacional fue fundada originariamente en 1948 por el Estado francés, Bélgica, Gran Bretaña, Luxemburgo y Países Bajos, con la excusa de un posible ataque soviético. Su artículo 5 prevé una asistencia mutua en caso de agresión militar a uno de sus miembros.
Pero fue eclipsada al año siguiente con la creación de la OTAN, lo que supuso que EEUU y Canadá mantuvieran tropas en el continente.
En los 80, París trató de dar bríos a la organización como pilar militar de la UE, pero Londres truncó el intento dando prioridad a la OTAN.
La adopción en 1999 de una política común de seguridad en la UE selló su defunción. Recelosa de la integración comunitaria, Gran Bretaña ha intentado mantener el cadáver moribundo. Hasta la reciente entrada en vigor del tratado de Lisboa. GARA