El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Parlamento mexicano, Porfirio Muñoz (Partido del Trabajo), afirmó el lunes que el Ejército mexicano ya ha sido derrotado por los cárteles de la droga, y que lo mejor que pueden hacer los militares para frenar la violencia es retirarse a sus cuarteles. Muñoz afirmó que, de los contrario, se estaría propiciando «la injerencia de Ejército extranjero», en referencia a EEUU.

Precisamente, ambos países celebraron ayer una cumbre, en la que reafirmaron su cooperación sin poner nada nuevo sobre la mesa.

Entretanto, la violencia siguió dejando rastro. Cuatro hombres murieron tiroteados en Ciudad Juárez, mientras que en Tuxtepec (Oaxaca) dos militares y siete supuestos delincuentes murieron en un enfrentamiento.