Malkovich: «Admiramos a los asesinos, aliviados por no ser las víctimas»
El polifacético actor John Malkovich presentó ayer en el teatro Arriaga «The infernal comedy», con las entradas agotadas. Un concierto lírico teatral en el que interpreta a un asesino en serie y poeta.Ane ARRUTI | BILBO
Comenzó en el teatro y creó la compañía Steppenwolf de Chicago, ha participado como actor en más de setenta películas, ha sido nominado en dos ocasiones al Óscar al mejor actor de reparto e incluso ha producido y dirigido sus propias películas. John Malkovich (Illinois, EEUU, 1953) se embarca ahora en un proyecto novedoso para él, la ópera. «Antes no se me había ofrecido la oportunidad de dirigir una ópera, pero no es que no quisiera hacerlo. Este proyecto me ofrece la oportunidad de sentir el increíble poder de la música. Soy una de esas personas que no sabe nada de clásica, sin embargo, es interesante descubrir el impacto que ésta tiene en el teatro».
«The infernal comedy» es un concierto lírico-teatral, una «comedia negra sobre un asesino en serie», como lo definió el actor estadounidense, quien codirige junto al director de escena Michael Sturminger.
La obra, escrita por Martin Haselböck, se basa en la vida real del austriaco Jack Unterweger, asesino convicto y aclamado poeta, quien tras ser perdonado se convirtió en escritor y periodista. «Notorio donjuán y ejemplo de reinsercción, se convirtió gradualmente en sospechoso de asesinar a un elevado número de prostitutas», y tras ser declarado culpable de once homicidios, se suicidó en prisión.
Malkovich declaró entender la fascinación que puede llegar a sentir la gente por un caso como éste. «Lo entiendo desde el punto de vista del alivio el desahogo que se puede sentir cuando una persona ve que él no es la víctima de ese asesino en serie. Además, el verlo reflejado en escena implica que puedes pensar en cómo lo puedes evitar, cómo podrías escapar y cómo te podría ayudar de cara al futuro. Esa fascinación aparece plasmada en la ópera muy a menudo. Hay gran abundancia de asesinatos, matanzas...».
De «bruces» con la música
Malkovich comparte escenario con dos sopranos, Bernarda Bobro y Marie Arnet, y la orquesta Wiener Akademie. La obra, estrenada en Viena en julio de 2009, incluye música de Vivaldi, Haydn, Mozart, Beethoven, Boccherini y Weber.
El actor confesó que la experiencia ha sido «muy educativa, aunque lo que yo hago cara al público es actuar. Lo más difícil es encontrar tu lugar en la música. Como director no estoy acostumbrado a trabajar con algo inamovible y la música lo es. Tienes que ser capaz de atravesarla, pero ni siquiera es posible. Tienes que ir sorteándola, por debajo, por encima... Trabajar con música es como darte de bruces con una casa. Te cae encima y tienes que ser capaz de encontrar el camino».
Además de mostrar su admiración por el «carácter efímero» del teatro, «como en la vida misma», apostó por la fuerza de la palabra, «en un mundo en el que la gente está sobrecargada de ver imágenes, no soy el mayor fan del espectáculo y creo en el poder de la palabra», dijo.