Pocos se acordaron de las matemáticas a las ocho de la tarde. El triunfo en Cádiz sabía a ascenso y, aunque los protagonistas intentaban mostrarse comedidos en sus declaraciones, conscientes de que aún faltaba el último trecho, la euforia era prácticamente incontenible.

«No podemos celebrarlo todavía, pero es un paso enorme -reconocía Jokin Aperribay-. Es muy distinto irnos de este campo con una victoria a hacerlo con un empate o una derrota. Ha sido un paso importantísimo», insistió el presidente, satisfecho por haber vivido «un día muy feliz para toda la familia realista».

Un día que, de todos modos, espera dejar pequeño dentro de una semana. «Estamos mucho más cerca, pero no vamos a cantar victoria -insistió-. Vamos a intentar rematarlo en el próximo partido todos juntos». Aperribay entendía las ganas de celebrarlo cuanto antes «porque llevamos tantas jornadas en puestos de ascenso, que se está haciendo muy largo», pero insistió en que «hay que esperar con calma».

Más templado aún, como es habitual, se mostró Martín Lasarte, que incluso fue inquirido al respecto. «Siempre digo que hay que vivir en el equilibrio. Y todavía no hay nada conseguido, aunque está muy perfilado -concedió-. El día que lo consigamos, no habrá mucha gente más feliz que yo. Entonces tendré mucho que agradecer y mucho por lo que estar contento, pero todavía no hemos llegado a esa situación».

El único hecho probado es que la Real cumplió con su parte ganando el partido y, en ese sentido, el técnico se reconocía sumamente satisfecho. «Era un partido complicado, frente a un rival que venía haciendo una buena recta final. Pero el equipo ha estado muy bien en todos los aspectos, defensivo, ofensivo, ha acertado cuando le tocaba y no ha dado chances al rival», aseguró Lasarte, que tampoco quiso olvidarse de la afición desplazada a Cádiz. «Se merece un gran aplauso, ha sido espectacular», aseguró.

Coincidía Mikel Ubarretxena, que ahora espera «que el domingo podamos celebrarlo todos juntos, los que hemos estado aquí y los que han seguido el partido desde casa, que esa explosión de júbilo sea para todos los realistas».

Inolvidable

Algo en lo que también confía el gran protagonista del encuentro. «Ahora nos toca rematarlo y que la fiesta sea completa -aseguró Carlos Bueno-. Ya hemos visto durante el año que es un error pensar en los demás. Más que nunca, tenemos que pensar en nosotros y celebrarlo entre todos».

Tampoco podía ocultar la alegría otro hombre habitualmente frío. «Este partido no lo olvidaré», aseguraba Mikel Aranburu . «Hay que esperar, pero en estos momentos tenemos muchísima alegría. Era un partido muy importante y hemos cumplido nuestra parte».