«Un gran campeón merece un equipo construido en colaboración con él»
Mnager del Astana
El equipo más fuerte de la primera etapa importante del Tour fue Astana, en el que sólo Contador repite del nueve del año anterior y después de haber querido irse. Yvon Sanquer ha sido el encargado de asumir la dirección del equipo, de ganarse la confianza de su líder y de conformar un equipo fuerte y en su entrevista a GARA explica el proceso que ha seguido para que Contador quiera seguir en él.
Joseba ITURRIA
En Astana había mucha satisfacción ayer por la respuesta del equipo. También Contador se mostraba contento, aunque admitía que le costó respirar por el calor al tiempo que indicaba que Andy Schleck será su principal rival. Pero el más satisfecho era Ivon Sanquer, al que antes del pasado Tour le pidieron que se encargara de un equipo en el que ninguno de los que lo corrieron con Astana se quería quedar.
¿Cómo ha vivido este año intenso con el equipo Astana?
Empezamos a mediados de noviembre a reconstruir el equipo. Era un poco tarde y hemos tenido que trabajar mucho. El primer objetivo fue llegar a un acuerdo con Alberto para que se quedara en Astana, que era muy importante. A partir de ahí el segundo objetivo era construir un equipo para ayudarle a ganar el Tour un año más.
¿Le resultó difícil convencerle para que se quedara?
La primera vez que hablé con Alberto fue en la presentación del pasado Tour, con su hermano. Le trasmití un mensaje claro. Comprendía que tuviera dudas para seguir en el equipo. Le dije que yo había entrado en Astana para cambiar las cosas con reglas precisas, con un funcionamiento claro y con una relación de colaboración con él. En los momentos buenos o malos, podíamos comunicarnos. A partir de ahí hemos trabajado juntos, nos hemos conocido. Ha visto que cada vez que hemos tomado alguna decisión, la hemos comentado con él y Alberto ha tenido la oportunidad de dar su opinión. Hacemos un trabajo de colaboración. Un gran campeón como Alberto merece que haya un equipo construido en colaboración con él.
¿Contador temía repetir con Vinokourov lo vivido con Armstrong?
Los objetivos son claros desde el momento en que Alberto decidió quedarse. La organización es clara, el objetivo prioritario es ganar el Tour con Alberto y Alexander está totalmente de acuerdo para ayudarle a ganar el Tour y hemos organizado el calendario de carreras para que Alexander, que tiene una grandes cualidades físicas, tuviera pruebas importantes en las que jugara sus cartas personales. Y el único líder para el Tour era Alberto, no había discusión desde el inicio.
Se ha demostrado que Astana tiene un equipo fuerte...
La primera semana siempre es difícil en el Tour porque los corredores están nerviosos. Alberto ahora tiene experiencia y hemos creado un equipo para ayudarle a superar la primera semana con serenidad. Hemos tratado de formar un grupo de corredores que sea fuerte para Alberto. Durante toda la temporada hemos creado los automatismos para hacer el trabajo. La París Niza ya fue importante para demostrar que podíamos trabajar para Alberto. Los demás corredores están contentos de ayudarle y él da confianza a los demás, que es importante. Ellos están motivados para trabajar para Alberto y con Alberto.
Parecía muy difícil que Contador se quedara en el 2010 y ahora se da por segura la renovación...
Primero trabajamos con Alberto para que se quede en el 2010 y lo hemos conseguido. Desde entonces lo que he querido es que Alberto se sienta bien en el equipo, que Astana funcione bien, queremos ganar este Tour con él. Después se verá qué hace Alberto en el futuro. Hay que hacer las cosas por etapas, respetar que la confianza se ha creado y luego afrontar el futuro.
¿Hasta cuando está asegurada la continuidad del equipo?
Astana tiene licencia hasta este año y la voluntad de seguir al menos tres temporadas más.
¿Astana este año ha cumplido con todos los compromisos?
Eso era importante y había que hacerlo comprender. La comunicación es importante entre la gente, he intentado explicar la situación, que hay reglas en el ciclismo, que son las mismas para todo el mundo y no pueden ser especiales para un equipo u otro. Hay que tener serenidad porque si se responde a todas las reglas, el equipo podría justificar la inversión importante que hace todo un país. Porque es el equipo de un país, representa a Kazajistán. Es muy importante y los dirigentes kazajos lo han entendido bien. Es importante tener un funcionamiento normal y correcto.
¿Desde fuera hay la sensación de que Vinokourov es el alma espiritual de este equipo?
Alexander tiene mucha experiencia en el ciclismo y es importante que sea un buen apoyo para Alberto en el Tour. Alexander para los jóvenes corredores kazajos representa algo importante, trasmite experiencia, tiene una influencia para que ellos trabajen como un gran profesional, porque Alexander trabaja mucho. Es muy profesional en su carrera deportiva.
¿Fue él quien le propuso la posibilidad de dirigir Astana?
Estaba en contacto con varias personas que me conocían. He trabajado con Andrei Kivilev, que era el gran amigo de Alexander, que también me conocía de cuando estaba en Francia en el equipo de Vincent Lavenu y ha habido otras personas que han pensado en mí para hacer este trabajo con Astana para intentar que continúe y para encontrar buenas soluciones para el futuro del equipo.
También entró Giusseppe Martinelli, que tiene experiencia como director deportivo y ha dirigido a grandes corredores anteriormente. Son importantes en un equipo personas que tengan experiencia, como en el equipo con los corredores. Hay que tener jóvenes corredores, pero también otros que tengan mucha experiencia porque en una carrera como el Tour la experiencia es muy importante.
¿Astana buscó una persona con buena relación con el Tour?
Tengo buena relación con el Tour, pero también con mucha gente, con la UCI también. Hago mi trabajo correctamente, seriamente, con mucho rigor, guardando los valores que siempre son los mismos. A partir de ahí las relaciones son normales con todo el mundo.
¿Es un hombre muy conocido en el mundo del ciclismo?
Tuve un hermano que fue corredor profesional en los años 70, yo fui corredor y después entrenador en un equipo francés de alto nivel amateur durante cuatro años, el US Creteil. Impulsé un equipo profesional durante cuatro años, Mutuelle de Seine-et-Marne (95-98), que corrió un Tour (97). Después en 1999 tras los problemas de Festina llegué para reconstruir el equipo. Estuve tres años hasta el 2001. Fui presidente de la Liga de Ciclismo profesional francés, trabajé para ella y ahora estoy en Astana como mánager general.