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Debate sobre el estado y las naciones

La unidad de mínimos catalana se deshace a las primeras de cambio

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Martxelo DÍAZ | IRUÑEA

El acuerdo de mínimos que el Parlament de Catalunya adoptó el pasado viernes en el Pleno extraordinario convocado para analizar la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) español saltó por los aires a las primeras de cambio, en la votación de las resoluciones del Debate sobre el Estado de la Nación que se celebró ayer en el Congreso de los Diputados, apenas cinco días después.

El PSC evitó oponerse al PSOE y no quiso incorporar la resolución unitaria del Parlament en la resolución que presentó este grupo.

La negativa del PSC provocó el rechazo de CiU y ERC que votaron en contra de la propuesta del PSOE, mientras que ICV se abstuvo. De este modo, la resolución no pudo salir adelante, ya que recibió 174 votos en contra, 169 a favor y cuatro abstenciones.

Por su parte, CiU, ERC e ICV presentaron por separado la resolución aprobada por el Parlament, que ratifica el preámbulo del Estatut, en el que se proclama el carácter de nación de Catalunya. El PSOE devolvió la jugada y estas tres resoluciones fueron rechazadas con la oposición del grupo mayoritario.

De este modo, el Congreso de los Diputados no aprobó ayer ninguna resolución en defensa del Estatut, pese a que los principales partidos catalanes -CiU, PSC, ERC e ICV-EUiA- se habían comprometido en este aspecto en la resolución del Parlament.

El portavoz adjunto de CiU en el Congreso, Pere Macías, acusó al PSC de «negar tres veces» su apoyo a la resolución del Parlament que sí aprobó el viernes. «Incluso han sido incapaces de asumir las primeras palabras del president de la Generalitat, José Montilla, sobre la sentencia del Constitucional», añadió Macías, que destacó que «el PSC vive una profunda crisis, puesto que no sólo no ha sido capaz de convencer al PSOE, sino que sus socios en Catalunya [ERC e ICV] han votado en su contra».

El PSC, por su parte, culpó a CiU de lo sucedido ayer en Madrid. El diputado Daniel Fernández acusó a los diez parlamentarios de CiU de mantener una actitud «interesada, egoísta, destructiva y tacticista».

«Han hecho todo lo posible para que nuestra resolución no fuera aprobada en el Congreso. No sólo ha votado que no, sino que además ha trabajado intensamente durante el día de hoy [ayer] para que otros grupos se sumaran a ese no», añadió Fernández.

Joan Ridao (ERC) señaló que el PSC «todavía deshoja la margarita de si le importa más el Gobierno de España o el Parlament de Catalunya» y acusó a CiU de filibusterismo.

Joan Herrera (ICV) calificó de «brindis al sol» la postura del PSC, porque lo aprobado ayer en el Congreso «no compromete a nada».

En este clima, el PP se sintió como el ganador del debate.

pensiones

Todos los grupos del Congreso se unieron frente al PSOE para pedir al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que suspenda las medidas de congelación de las pensiones y el aumento de la edad de jubilación.

aborto

Una enmienda presentada por el PSOE y transaccionada con ERC-IU-ICV y BNG exige al Gobierno que haga cumplir la nueva Ley del Aborto. Fue aprobada por 183 votos a favor, 153 en contra y once abstenciones.

burka

El Pleno del Congreso rechazó con 183 votos en contra y 168 a favor una propuesta del PP para instar al Gobierno a prohibir el uso del burka y el niqab en espacios o acontecimientos públicos.

CiU sí que apoyó al PSOE para aprobar el techo de gasto

A diferencia de lo que sucedió con las resoluciones sobre el Estatut, CiU optó por apoyar al PSOE mediante la abstención a la hora de aprobar el techo de gasto para limitar el nivel de endeudamiento de las administraciones públicas. De este modo, el PSOE pudo salvar los muebles en una votación considerada clave.

La abstención de CiU, unida a la de CC y UPN, permitió que los 169 escaños del PSOE resultaran suficientes para aprobar el techo de gasto ante el voto en contra de PP, PNV, ERC, IU-ICV, BNG, NaBai y UPyD, que sumaron 166.

La vicepresidenta económica, Elena Salgado, destacó que el techo de gasto «se enmarca en el proceso de aceleración de la reducción del déficit público ante el notable deterioro de las cuentas públicas, que tendrá un efecto positivo en la reducción de la prima de riesgo de España en los mercados financieros».

El portavoz económico de CiU, Josep Sánchez-Llibre, justificó su abstención en «la responsabilidad» y criticó la oposición del PP, ya que «parece que quiere ver la economía española intervenida por la UE o por el FMI». GARA

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